Maite UBIRIA BEAUMONT
BAIONA

París sitúa la lupa en los Pirineos y acelera las redadas anti migrantes

En el centro de acogida de urgencia abierto en el muelle Lesseps de Baiona se respira un ambiente tenso. La parada de autobús situada a unos metros del local era hasta ahora la promesa de seguir viaje. La operación de bloqueo de un autocar y la detención de 19 pasajeros, en Landas, apunta al bloqueo de esa vía.

El centro de acogida abierto, con la complicidad de Mancomunidad Vasca y Ayuntamiento, en el barrio popular de Saint-Esprit es la referencia para las personas migrantes que, tras cruzar la muga desde Irun, consiguen alcanzar la capital labortana.

Antes, estos ciudadanos peregrinaban hasta la Place des Basques, estación de transporte por carretera. Tras la puesta en marcha del local del muelle Lesseps, la parada de autobuses de larga distancia –el medio de transporte más asequible para llegar a París– se ha trasladado a las cercanías del centro de acogida.

El lunes, a media mañana, una larga hilera de migrantes esperaba para montar en uno de esos autocares. Tras emprender viaje, como tantos otros antes, el autobús en que viajaban fue detenido, hacia el mediodía, en el peaje de la autopista A63, a la altura de Bénesse-Maremne (Landas). En total, según la información difundida por la emisora France Bleu, la policía practicó 19 detenciones.

La Prefectura de Landas se encargará de decidir sobre el futuro próximo de esos ciudadanos, pero las opciones son básicamente dos: un traslado inmediato a la muga de Biriatu-Irun –es posible que a la hora de publicar estas líneas ya se haya efectuado– o la asignación temporal a un CRA o centro de retención, lo que daría a los implicados alguna opción de tramitar la pertinente demanda de asilo.

Bien es cierto que la asignación de residencia se acompaña, amenudo, de una orden de expulsión –plazo máximo 45 días– lo que limita las opciones de seguir en territorio galo para cuando se completa la tramitación de la demanda.

«Sin cabeza ni corazón»

En una entrevista concedida a Info7 a raíz de la orden de expulsión de que son objeto los jóvenes migrantes que acoge en su domicilio, el jubilado hazpandarra Xarlo Etxezarreta expresaba ayer que «sabíamos que la ley se aplicaba sin corazón, ahora sabemos que también sin cabeza».

Alassane y Mamadou, originarios de Costa de Marfil pero residentes desde un año en esta comarca labortana, contarán con la asistencia de la Cimade, para tratar de hacer frente, por vía administrativo-judicial, a un calendario adverso que indica que en mes y medio deberán salir de «territorio francés».

Las asociaciones temen que la operación de Hazparne marque el arranque de una política de mano dura contra la acogida, y la detención de un autobús en Landas parece confirmar las previsiones más pesimistas.

Castaner insiste en sus advertencias contra el asilo

Christophe Castaner ya hizo de «lanzador de alertas» en diciembre de 2017, cuando advirtió de un aumento de las demandas de asilo del 80% desde 2010. Tras pasar de portavoz a titular de Interior, deja sentado que «Francia va a limitar las concesiones de asilo». Con ello trata de hacer desistir a los migrantes que cruzan la península en dirección al Estado francés. Para ello, al igual que sus predecesores, reivindica la «política de cifras»: desde enero, París ha expulsado a 10.000 personas (+30%). Y siguiendo con la receta, anuncia más policía. M.U.B.

Ahmed: «¿Qué haríamos nosotros sin vuestra ayuda?»

Ahmed, 16 años, natural de Costa de Marfil, vive en Behauze (Nafarroa Beherea), en casa de Monica Haran y Felix Castets. Estudia en el liceo de Maule, y sueña con «ser chófer o, mejor, conductor del camión de basura». Kazeta.eus / Mediabask han recogido en un emotivo vídeo las vivencias de este superviviente: grabó el naufragio de la balsa en que cruzó el Mediterráneo antes de ser rescatado in extremis por Salvamento Marítimo. Traslada un mensaje de esperanza, dirigido a los migrantes que siguen llegando a Euskal Herria. M.U.B.