GARAY
ESTAMBUL

Los funerales sin el cuerpo de Khashoggi reiteran la acusación a Bin Salman

Mientras Riad trata de presentar una versión aceptable para sus aliados sobre la muerte de Jamal Khashoggi, desde Turquía dos supuestas grabaciones desmintieron el último relato de la Fiscalía saudí. Sin el cuerpo del periodista, sus funerales lanzan mensajes de denuncia.

Varias decenas de personas celebraron ayer en Estambul una ceremonia fúnebre en homenaje al periodista saudí Jamal Khashoggi, cuyo cuerpo sigue sin aparecer mes y medio después de su muerte, que volvió la atención del mundo sobre la tiranía saudí.

Riad sigue sin aclarar los detalles de su muerte, después de haberse resistido a reconocerla. Ante un espacio vacío, tradicionalmente reservado a un féretro delante de la mezquita Fatah, amigos de Jamal Khashoggi pronunciaron una oración para el ausente, un ritual del islam para los muertos cuyos cuerpos fueron destruidos o no han sido hallados.

Similares funerales simbólicos ya se han celebrado en las pasadas semanas en Londres, La Meca, Medina, Túnez, París y Washington.

Además de celebrar esta ceremonia con la convicción de que el cuerpo «nunca será encontrado», sus amigos quisieron que fuera también «un mensaje que se envía al mundo para decir que el asesinato no quedará impune. Se hará justicia», según señaló Ibrahim Pekder, uno de los asistentes.

Versión saudí

La Fiscalía saudí anunció el jueves que pide la pena de muerte contra cinco de los acusados a la vez que exoneró al príncipe heredero Mohamed bin Salman, acusado por los medios de comunicación y autoridades turcas de estar detrás de su muerte.

Según el fiscal saudí, que en total ha imputado a 11 personas, un equipo fue enviado a Estambul para traer al periodista de vuelta a Riad, de forma voluntaria o por la fuerza, pero su jefe tomó la decisión de matarlo sin consultar con sus superiores.

Pero esta versión fue descartada ayer por Yasin Aktay, un amigo de Khashoggi y consejero del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan.

«Quieren hacernos creer que los asesinos tomaron ellos solos la decisión de matar a Jamal Khashoggi. No creemos esta historia. Seguiremos preguntando quienes son realmente los que dieron la orden», afirmó. Riad sigue intentando presentar un relato que sus aliados puedan aceptar y exculpe a Bin Salman.

Pero una tras otra, sus versiones –que comenzaron por negar que Jamal Khashoggi estuviera muerto– van chocando con nuevas evidencias reveladas desde Ankara.

Dos nuevas grabaciones

El editorialista Abdulkadir Selvi, cercano al Gobierno turco, afirma en el periódico “Hürriyet” que una grabación sonora en poder de las autoridades turcas demuestra que en ningún momento se intentó negociar con Khashoggi para convencerlo de que regresara a Arabia Saudí.

Sostiene que el periodista saudí no fue drogado sino que lo estrangularon o asfixiaron «con una cuerda o una bolsa de plástico».

Según Selvi, los servicios de seguridad turcos también tienen una segunda grabación sonora de 15 minutos realizada antes de la muerte que no deja lugar a dudas sobre el carácter deliberado del crimen.

En esta cinta se oye al equipo saudí hablando sobre cómo van a matar a Khashoggi, revisando el plan preparado de antemano y recordando a cada uno de los miembros el papel» que debían desempeñar, según Selvi.

«También hay pruebas recabadas después del asesinato, como llamadas telefónicas internacionales realizadas por el equipo saudí», añadió.