GARA
LONDRES

May rechaza las demandas de otro referéndum sobre el Brexit

A medida que crece la posibilidad del fracaso del acuerdo sobre el Brexit pactado entre Londres y Bruselas, aumentan las voces que reclaman un segundo referéndum. El propio Gobierno estaría dividido al respecto, aunque Theresa May insiste en que no lo convocará.

El ministro de Educación británico, Damian Hinds, aseguró ayer que la primera ministra, Theresa May, no tiene la más mínima intención de convocar un segundo referéndum sobre el Brexit a pesar de la debilidad que está exhibiendo a la hora de conseguir la aprobación de su plan de salida de la UE, pactado con las autoridades de Bruselas.

La posibilidad de que el acuerdo fracase cobra fuerza a la vez que las alternativas de un Brexit duro, sin las condiciones pactadas, o incluso de una marcha atrás en la decisión a través de una consulta.

«Un segundo referéndum causaría división. La gente ya ha votado, ya hemos tenido ese referéndum y ahora tenemos que ponernos manos a la obra para aplicarlo», señaló el ministro a Sky News.

Hinds salía así al paso de las cada vez más insistentes voces que sugieren una nueva consulta para replantear la decisión. Según “The Times” la mayoría del Gobierno de May cree que el pacto está muerto y ya no descarta por completo la posibilidad un nuevo plebiscito.

Las fuentes del periódico describían un gabinete de ministros fragmentado en múltiples frentes. Uno de ellos, liderado por el ministro de Finanzas, Philip Hammond, es el que más se está acercando a la posibilidad de recomendar un nuevo referéndum, aunque como la última opción, cuando «todas las demás fueran agotadas». “The Sunday Times”, insistió ayer en que el «número dos» del Ejecutivo, David Lidington, ha comenzado a sondear a diputados sobre el posible apoyo que tendría un referéndum en la Cámara de los Comunes.

Sea como fuere, según el diario, May ya estaría anticipando que el Parlamento derribe su plan para devolver la pelota a Bruselas, a pesar de que la UE repite a diario que no habrá una nueva negociación.

El ex primer ministro Tony Blair fue ayer blanco de las críticas de May, al haberse sumado a quienes apuestan por convocar un segundo referéndum. La primera ministra afirmó que la postura de Blair es «un insulto al cargo que una vez ocupó».

Mientras, el Partido Laborista espera forzar una votación del Acuerdo de Retirada en cuestión de días. Parte de las bases laboristas han iniciado una campaña para defender una consulta, aunque miembros de la dirección temen que esa opción podría dañar sus opciones electorales, dado que una parte de sus votantes defendieron el Brexit.

Precisamente, la ministra principal escocesa, la nacionalista Nicola Sturgeon, criticó ayer esa indefinición laborista, a la vez que defendió la convocatoria de un nuevo plebiscito como la única vía para corregir el »desastroso» proceso en el que está inmerso el Reino Unido. Al mismo tiempo, se prepara un escenario sin acuerdo. La Comisión Europea publicará el miércoles «todas las informaciones generalmente útiles» para prepararse ante un escenario de salida sin acuerdo, y Dublín ha concretado los preparativos ante la posibilidad de que el próximo 29 de marzo Reino Unido abandone la UE de forma no negociada.