GARA
WASHINGTON
CRISIS POLÍTICA EN EEUU

Trump atiza miedos para rascar el aval popular a la ampliación del muro

Desde el Despacho Oval, Trump trató de avivar las pulsiones más emocionales para justificar su ampliación del muro. Los demócratas, a quienes acusó de una parálisis de la Administración Federal que no es sino responsabilidad suya, replicaron al discurso a la Nación reivindicando el valor de los hechos frente al miedo como arma política.

El presidente de EEUU, Donald Trump, trató de alinear a los estadounidenses con su proyecto de ampliación del muro en la frontera con México y, pese a que renunció a declarar el asunto como emergencia nacional, con todas sus consecuencias, no dudó para ello en atizar todo tipo de miedos.

En su primer discurso televisado desde el Despacho Oval, el inquilino de la Casa Blanca tildó la situación en la frontera del sur como una «creciente crisis humanitaria y de seguridad».

«Todos los estadounidenses se ven afectados por la descontrolada migración ilegal (....), que reduce los empleos y los salarios (...) No tenemos espacio para retenerles y no tenemos forma de trasladarles de inmediato a su país», insistió.

Drogas y Vietnam

En su alocución, de 9 minutos de duración, Trump vinculó directamente y sin prueba alguna el muro y el consumo de drogas en EEUU. Así, tras traer a colación que «este año morirán más estadounidenses por drogas que en toda la guerra de Vietnam», «argumentó» que el muro se pagaría «por sí mismo», dado que, siguiendo con su lógica, su muro interrumpiría la llegada de drogas ilegales, «que cuestan a EEUU unos 500.000 millones de dólares al año».

Ello no le impidió volver a pedir los 5.700 millones de dólares para financiar su ampliación del muro, «de acero en vez de hormigón», proyecto que rechazan los demócratas, a lo que Trump ha respondido con la parálisis parcial de la Administración federal, que cumplió ayer 18 largos días.

Al magnate se la trae al pairo que vincular el problema del primer país consumidor de drogas del mundo con el muro sea como poco una tergiversación, o incluso una falacia. Como no le importa el hecho de que si en el año 2000, 1,6 millones de personas fueron detenidas tratando de cruzar la frontera sur hacia EEUU, la cifra cayó hasta menos de 400.000 en 2018,

En la misma línea, Trump aseguró que «a lo largo de estos años, miles de americanos han sido brutalmente asesinados por los que entraron ilegalmente en el país y otros miles de vidas se perderán si no actuamos de inmediato». Y, ya en el colmo del cinismo, mostró su «preocupación» por que «una de cada tres mujeres son agredidas sexualmente en el peligroso viaje a través de México. Las mujeres y los niños son las mayores víctimas», insistió en plenas críticas por la muerte de menores inmigrantes por falta de asistencia en los centros de detención estadounidenses.

Réplica demócrata

Tan pronto concluyó la alocución presidencial y en un hecho inédito, los líderes demócratas respondieron a sus afirmaciones durante el mismo tiempo en el aire que las principales cadenas de televisión concedieron al gobernante.

El presidente Trump «debe dejar de mantener como rehén al pueblo estadounidense, dejar de fabricar una crisis y debe volver a abrir la Administración», dijo la flamante presidenta de la Cámara Baja, la demócrata Nancy Pelosi, para reiterar que «el presidente ha elegido el miedo. Nosotros queremos comenzar por los hechos».

«El símbolo de América debe ser la Estatua de la Libertad, no un muro de 9 metros», señaló el el líder de la minoría demócrata en el Senado, Chuck Schumer. «Nuestra sugerencia es simple, señor presidente: reabrir el Gobierno y trabajar para resolver nuestras diferencias sobre la seguridad fronteriza», añadió el portavoz demócrata..

Una frontera virtual tecnológica como alternativa más económica

La startup Quanergy ha presentado en el salón CES de La vegas un proyecto «alternativo» de un muro virtual basado en el «Lidar», una tecnología utilizada en la conducción autónoma, pero aplicado a la vigilancia fronteriza.

Testado en la frontera indo-paquistaní, y basado en radares, captadores y cámaras, «puede ver de día y de noche independientemente de la meteorología e identificar a los intrusos y dar su posición GPS a las fuerzas del orden», aseguran sus promotores.

Louay Eldada, responsable de la empresa, incluye entre sus ventajas su menor impacto medioambiental y sobre todo su menor coste, «1.500 millones de dólares», menos que los 5.000 que pide Trump e incluso de los 70.000 millones que supondría un muro total.AFP