El Ibex dio ayer un salto significativo para conquistar los 9.300 puntos. Le ayudaron en el éxito las buenas noticias de China, donde la actividad manufacturera recuperaba impulso en marzo después de tres meses en contracción. Los dos índices de referencia, el elaborado por los organismos estatales y el PMI Caixin, superaron la barrera de los 50 puntos. En el primer caso subió hasta los 50,5 puntos, frente a los 49,2 anteriores, mientras el segundo alcanzó los 50,8 puntos cuando el mes anterior se quedó con 49,9.

Los índices europeos se parapetaron tras este buen dato de China para afrontar una nueva decepción con el sector manufacturero europeo. Los PMI de Alemania, el Estado francés y del conjunto de la eurozona siguen evidenciando la ralentización de la economía al mantenerse por debajo de los 50 puntos, línea que separa la expansión de la contracción.

El Ibex, que abría con fuerza al alza, pudo terminar la jornada con 9.341,70 puntos tras anotarse un 1,10%. Las subidas de Fráncfort (+1,35%) y de París (+1,03%) también fueron notables. Londres, por su lado, ganaba un 0,52% en un nuevo día de votaciones en el Parlamento británico. En Wall Street, los índices principales partían en verde apoyados en las palabras positivas que han acompañado a la última ronda de negociaciones comerciales con China.

Los bancos volvieron a liderar al Ibex, empujados por las posibles compensaciones del BCE para hacer frente a los bajos tipos de interés. Caixabank ganó un 4,63%; BBVA, un 4,18%; Sabadell, un 4,15%; Bankinter, un 3,24%; Santander, un 3,08%; y Bankia, un 3,07%. El más alcista fue ArcelorMittal (+5,49%). Los títulos de Enagás y Red Eléctrica, que recortaron más de un 1%, cosecharon los peores balances.