Koldo LANDALUZE
DONOSTIA
Entrevue
SARA COLANGELO Y MAGGIE GYLLENHAAL
DIRECTORA Y PROTAGONISTA DE «LA PROFESORA DE PARVULARIO»

«‘La profesora de parvulario’ es el doloroso hundimiento de una mujer»

La guionista y cineasta Sara Colangelo ha sido la encargada de filmar el remake de la película homónima que fue dirigida por Nadav Lapid en el 2014. Esta nueva versión protagonizada y producida por Maggie Gyllenhaal se alzó con el Premio al Mejor Drama en la última edición del certamen de cine independiente de Sundance.

“La profesora de parvulario” se revela como un thriller psicológico sobre una profesora de una pequeña escuela de Staten Island que asiste a clases nocturnas de poesía. Su mecánica cotidiana cambia por completo cuando, un día descubre que un niño de su clase tiene un prodigioso don para la poesía y, a partir de ese momento, hace todo lo que está a su alcance para apoyar y cultivar su talento hasta llegar a extremos tan peligrosos como desconcertantes.

En relación a este proyecto que se alzó con el Premio al Mejor Drama en la última edición del festival de Sundance, su guionista y directora –Sara Colangelo– señala que «uno de los factores que me llevaron a participar en este filme es que todo el protagonismo recae en una mujer. Me ha permitido profundizar en la fascinante sicología de la protagonista y explorar su funcionamiento interno, sus buenas intenciones y su deseo de vivir una vida más significativa. La historia también proporciona lo que creo que es un papel principal, complejo y lleno de matices, para una mujer de más de 40 años, una rareza tanto en Hollywood como en la industria cinematográfica independiente».

Otro factor determinante dentro del engranaje dramático es el papel que ejerce la propia poesía. En relación a ello, Colangelo dice que «la película me ha posibilitado una oportunidad única para discutir qué papel, si es que tiene alguno, tiene la poesía en la vida estadounidense moderna. ¿Hay espacio para la belleza, el significado y la expresión humana en la sociedad actual y en un mundo de smartphones, videojuegos y guerras remotas en el extranjero? Es una pregunta vital, y creo que vale la pena enfrentarla a las audiencias estadounidenses e internacionales».

En cuanto a qué es lo que el espectador encontrará en “La profesora de parvulario”, su autora avanza que «trata sobre el deseo insatisfecho de ser poeta, sobre el prodigio, sobre la mediocridad, sobre esforzarse por ver el mundo desde nuevos enfoques, sobre la búsqueda de la belleza en lugares poco comunes. Y espero que surjan preguntas interesantes sobre la autoría, sobre quién decide qué es el arte y sobre quién puede elogiar a quién. El poeta Carl Sandburg escribió que ‘la poesía es el diario de un animal marino que vive en tierra, queriendo volar en el aire’. Algo sobre esa representación de la poesía me recuerda mucho a la protagonista. Es una mujer de mediana edad que despierta gracias al arte por primera vez. En muchos sentidos, es una criatura desplazada que quiere volar, quiere ser una mejor versión de sí misma y quiere sentirse más viva. Cuando no puede cumplir sus propias ambiciones artísticas, decide que lo hará a través de su estudiante. Ella está en una búsqueda, una búsqueda seria, bienintencionada, pero retorcida, para entregar un pequeño poeta al mundo y asegurarse de que su voz se escuche en medio del ruido y la banalidad que rodea la vida moderna».

 

Gyllenhaal, la profesora

Maggie Gyllenhaal ha sido la encargada de meterse en la piel de un rol protagonista muy complejo. En relación a las impresiones que le causó el guion, la intérprete afirma que «cuando lo leí por primera vez, creo que fue una conexión visceral. La escritura era muy buena y sentí un impulso magnético por interpretar el papel, pero ahora que lo he hecho y lo he digerido, creo que lo que me conectó fue el tipo de sensación que muchas mujeres tienen en la actualidad, un despertar ante una especie de muerte interior por haber pasado la mayor parte de la vida comprometiéndose en una cultura que realmente no fue creada para nosotras. Y qué sucede cuando ya no puedes soportarlo más, porque “La profesora de parvulario” es sobre una mujer que se desmorona».

En cuanto a su rol afirma que «el filme trata las consecuencias de lo que sucede cuando desfallece una mujer vibrante, quizás una artista vibrante. No creo que mi personaje sea una poeta terrible, a pesar de que eso es lo que piensa su profesor de poesía en la escuela nocturna, que está interpretado por Gael García Bernal. Creo que es una poeta inaudita y mal entendida. ¿Es ella el genio más grande del mundo? No. Pero es interesante considerar quién puede decidir qué trabajo vale la pena. ¿Quién decide qué se publica y qué se alaba?. Tampoco creo que el niño sea un super genio. No creo que ese sea el punto de la película. Creo que es más la necesidad de la protagonista de interactuar artísticamente, de expresarse artísticamente, proyectándose en su pequeño alumno. Eso es realmente lo que más la mueve: de alguna manera está hambrienta, pero va por el camino equivocado para tratar de alimentarse».

Hija de la escritora Naomi Forner y del director Stephen Gyllenhall, y hermana del también actor Jake Gyllenhaal, la protagonista y productora de “La profesora de parvulario” adquirió gran relevancia interpretativa a raíz de su participación en piezas de culto como “Donnie Brasco” y “Secretary”. Desde entonces siempre ha alternado producciones de corte independiente y comercial. Ejemplo de ello son propuestas como “Sherrybaby” y “The Dark Knight”. 

Además de cosechar sendas nominaciones al Óscar y a los Globos de Oro, Maggie Gyllenhaal siempre ha destacado por su activismo en favor de las libertades civiles y en la reivindicación de la mujer dentro de la industria cinematográfica. En este sentido, la actriz destaca que «no creo que algo que esté escrito o dirigido por una mujer sea necesariamente una expresión de algo particularmente femenino. Creo que vivimos en un mundo en el que estamos acostumbradas a contar una historia masculina. Estamos acostumbradas a que el personaje más interesante sea un hombre, y ahora estamos abriendo espacios  para hacer algo diferente, para decir las cosas de otra manera».

Uno de los factores más complejos de la película se concretó en el trabajo con los niños. Algo que la protagonista define como una experiencia que resultó «muy favorable por el respeto y tacto con el que se abordó esta situación. Como productora del filme, asistí a todas las reuniones relativas al plan de trabajo. Originalmente habían planeado filmar a los niños de manera convencional, y dije: ‘Como actriz, sé de qué hablo. No hay forma de que obtengamos lo que queremos obtener de estos niños de esta manera’. Así que los filmamos como si de verdad estuviéramos relacionándonos en un jardín de infancia».