GARA
ALAVÉS

Incendio institucional antes de la disputa del derbi

Abelardo quiso apagar el fuego subrayando su buena relación con Kerejeta.

El Alavés está viviendo en carne propia lo cambiante que es el fútbol. En apenas unas semanas, ha pasado de protagonizar un sobresaliente momento deportivo a estar inmerso ahora mismo en un auténtico incendio institucional. A la caída en su rendimiento y el cese de actividad de Iraultza1921, le ha sucedido ahora la no continuidad de Abelardo y el consiguiente rebote de los propietarios del club.

El propio entrenador asturiano trató de quitarle hierro al abismo abierto entre su cuerpo técnico y el grupo dirigido por Josean Kerejeta. «Mi relación con él ha sido, es y será siempre muy buena», señaló en unas declaraciones conciliadoras tras las palabras bastante más contundentes del máximo accionista de la entidad albiazul, asegurando que el Pitu había pedido ganar más del doble de su actual sueldo.

«Tengo la conciencia tranquila y sé que siempre he dado todo por el Alavés. Además, estoy agradecido por la oportunidad que me dieron en el club», amplió el preparador albiazul, al que ni se le pasa por la cabeza que la situación derive en su destitución. «Quedan cuatro partidos por jugar y mi relación con los dirigentes es muy buena. Ahora solo pienso en trabajar para intentar ganar el derbi de este sábado», indicó.

San Mamés, visita complicada

Lo que está claro es que la situación no es precisamente la idónea para afrontar un partido de estas características, con una plantilla que hace nada soñaba con disputar competición europea y que ahora mismo no sabe siquiera si continuará el próximo año, a la vista de los cambios que se avecinan, empezando por un nuevo inquilino para el banquillo.

Y es que en San Mamés se presenta la que parece puede ser última oportunidad de seguir aferrándose al sueño continental, además frente a un rival directo que compite por los mismos objetivos. Un estadio que históricamente no se le da demasiado bien a la escuadra babazorra, donde solo ha ganado en una ocasión y empatado en otra tras quince visitas.