GARA
Athletic

Buen sabor de boca para acabar la estancia alemana

Los rojiblancos superaron al Borussia Mönchengladbach (0-2) con goles de Williams –de penalti– y Córdoba.

El Athletic terminó con buen sabor de boca su estancia en tierras alemanas, derrotando por 0-2 a un Borussia Mönchengladbach que estuvo mucho menos efectivo que los rojiblancos en ambas áreas. Iñaki Williams, que transformó un penalti al cuarto de hora, e Iñigo Córdoba fueron los autores de los goles de la escuadra vizcaina.

Cierto es que, después de los primeros tanteos entre ambas escuadras, el envite se le puso muy de cara a los pupilos de Gaizka Garitano con la materialización de la citada pena máxima. Esta llegó como fruto de unas manos de Lang dentro del área que el árbitro interpretó que se habían interpuesto en un disparo de Córdoba que llevaba visos de encontrar los tres palos.

El 0-1 le dio más poso todavía al Athletic para hacerse dueño y señor del encuentro, bien plantado sobre el césped, marcando el tiempo del choque y saliendo con rapidez cada vez que el rival perdía la pelota en zonas delicadas. Con esa tónica transcurrió la primera parte, sin que hubiese muchos más lances que reseñar en una y otra portería.

Tras el descanso, saltó el Mönchengladbach con ganas de enjugar la diferencia cuanto antes. Un malintencionado chut de Musel con el exterior de su pie derecho que cogía trayectoria en dirección a la escuadra encontró la oportuna respuesta en la estirada de un Iago Herrerín que había sido el único cambio tras el descanso del once con el que se había iniciado el partido y que estuvo formado por Unai Simón, Capa, Núñez, Nolaskoain, Yuri Berchiche, Dani García, Unai López, Ibai, Muniain, Córdoba y Williams.

El 0-2, a la contra

La réplica a la fuerte salida germana la puso una galopada de Williams por la derecha, que pilló desprevenida a la adelantada defensa teutona para romper líneas y acabar sirviendo a un Córdoba que acompañó la jugada y solo tuvo que empujar a la red con su pierna izquierda para subir el 0-2 al electrónico.

Con esta segunda diana, el Athletic acabó por finiquitar la contienda ante un Mönchengladbach que era un quiero y no puedo, y al que le faltó calidad y fútbol para inquietar a un conjunto vasco que se centró en ser solvente y buscar espacios con vertiginosas contras.

Así bien pudo aumentar más todavía el electrónico por mediación de Villalibre y Sancet, especialmente en el caso del segundo quien, llegando desde atrás, armó un disparo raso que repelió el poste derecho.