Amaia U. LASAGABASTER
DERBI EN EL SADAR

Una fiesta repleta de ingredientes reabre El Sadar

El campo iruindarra vuelve a acoger un partido de Primera División dos años después con el primer derbi de la temporada.

77 días después de que un gol de Xisco derrotara al Oviedo para redondear una temporada perfecta, el Sadar reabre sus puertas. Vivió una fiesta entonces y se prepara para vivir hoy otra, con todos los ingredientes: acogerá un duelo de Primera, al que Osasuna llega tras reestrenarse en la categoría con victoria, y lo hará en forma de derbi. El primero de los cuatro que acogerá el estadio iruindarra en una temporada histórica para el fútbol vasco que, por cuarta ocasión en los 91 años de vida de la competición, vuelve a contar con cinco representantes.

La fiesta no será exclusivamente rojilla. O al menos eso espera un Eibar que llega a la cita doblemente motivado. Quiere sus primeros puntos del curso tras caer en un mal partido ante el Mallorca y con la complicada visita al Atlético la próxima semana para completar este arranque de la Liga; y el choque, además, le ofrece la posibilidad de hacer otra muesca en la serie de hitos, mayores o menores, que viene marcando en Primera: Osasuna es uno de los seis equipos a los que no ha podido ganar desde que ascendió.

Mucho tendrá que mejorar respecto al pasado sábado si quiere hacerlo ahora, sobre todo teniendo en cuenta que la falta de intensidad, uno de los mayores pecados que se pueden cometer ante Osasuna, fue uno de los aspectos que le costó la derrota en Son Moix. El armero es, además, un equipo en construcción, por mucho que no haya sufrido demasiados cambios en número de jugadores. Pero ha perdido a dos futbolistas fundamentales: su creador de juego (Jordán) y su lateral derecho (Peña), y tiene al lateral zurdo (Cote) en la enfermería. De allí sale Diop que, muy probablemente, tendrá hueco en un once en el que también podrían entrar Arbilla o Bigas por la izquierda.

También tiene cosas que mejorar Osasuna, sobre todo con el balón en los pies, y también podría introducir cambios Jagoba Arrasate, que citó a los 23 jugadores disponibles, incluyendo por tanto a Rubén García, Navas, Adrián o Roncaglia. Este último, de hecho, podría dar nombre a una de las novedades en el once, en el que tampoco se descarta la entrada de Cardona o Fran Mérida, aunque el técnico no descartó que repita Moncayola, de nuevo en la convocatoria.

Intensidad, concentración y la grada

Jagoba Arrasate y José Luis Mendilibar saben perfectamente qué deben hacer sus equipos, otra cosa es que lo consigan, para hacerse hoy con los tres puntos. Ambos destacan la importancia de la intensidad, la concentración y el empuje de la grada.

«Quiero ser competitivo –asegura Arrasate–. Necesitamos estar mucho mejor con el balón que el otro día y necesitamos apretar y presionar al Eibar porque si no se va a jugar en nuestro campo y entonces seguramente no lleguen buenas noticias». Mendilibar advierte de que los navarros «son pegajosos y verticales, no se entretienen. Va a ser un partido duro, no es fácil mantener la concentración los noventa minutos y saber qué tienes que hacer en todo momento. Hay que intentar estar concentrados el mayor tiempo posible y acertar con las decisiones».

«El Sadar le suele dar mucho a Osasuna», aseguró también el técnico. «El único Sadar que conozco como local ya sabéis cuál es –corroboró Arrasate– y espero ese Sadar que retumbe». A.U.L.