El Gobierno de Ruanda, la Unión Africana (UA) y el Alto Comisionado de la ONU para Refugiados (Acnur) firmaron ayer un memorando de entendimiento para establecer un mecanismo con el que evacuar a los refugiados y solicitantes de asilo que se encuentran en centros de detención en Libia.

Un primer grupo de 500 personas, sobre todo del Cuerno de África, serán evacuadas por aire en «las próximas semanas», según informó Acnur en un comunicado.

Ruanda acogerá y dará protección a esos refugiados y solicitantes de asilo, aunque no sean ruandeses y que se encuentran en centros de detención de Libia.

Organizaciones defensoras de los derechos humanos denuncian que en estos centros en Libia se cometen abusos y torturas, y Acnur ha pedido en más de una ocasión que sean cerrados.

Una vez en Ruanda, los refugiados que se acojan voluntariamente al acuerdo podrán ser reubicados en terceros países, ir a aquellos donde el asilo les haya sido concedido o volver a sus países, si es seguro hacerlo. También hay quienes podrán quedarse en Ruanda, si consiguen el permiso de las autoridades de este país de África oriental.

Acnur ya ha ayudado a evacuar de Libia a otros países a más de 4.400 solicitantes de asilo, aunque, según denuncia, se estima que hay aún otras 4.700 personas en «condiciones graves» dentro de los centros libios de detención, que necesitan «ser reubicadas con urgencia de forma segura».

Ruanda acoge a más de 145.000 refugiados, según el informe de tendencias actuales de 2018 de Acnur, sobre todo procedentes de la República Democrática del Congo (RDC) y de Burundi.