Agustín GOIKOETXEA
BILBO

Laboral Kutxa estima que la recuperación tardará dos años

La sacudida del covid-19 hará que hasta 2023, según un informe de Laboral Kutxa, la economía en Hego Euskal Herria no vuelva a parámetros similares a los de antes de la pandemia. Incertidumbre es la palabra clave, con expectativas de caída del PIB del 8,9% en la CAV y 8,6% en Nafarroa. «En dos meses hemos perdido dos años», subrayaron.

Laboral Kutxa presentó ayer, en Bilbo e Iruñea, el Informe de Economía Vasca de 2019 y también expuso sus previsiones. Con la información disponible al cierre del estudio, Ibon Urgoiti, director de Desarrollo de Negocio, confirmó que las expectativas son negativas, con tasas de crecimiento de -8.9% en la CAV, -8,6% en Nafarroa y -9,4% en el Estado español.

Si no hay rebrotes de coronavirus, 2021 será un ejercicio en el que esos índices pasarán a valores próximos al 7% en esos tres ámbitos territoriales. Como factor positivo a tener en cuenta, apuntó Joseba Madariaga, director de Estudios, se encuentra el fondo europeo de recuperación que puede permitir generar proyectos y empleo en «sectores de futuro».

La covid-19, expusieron, ha provocado la que probablemente será la recesión global «más breve de la historia», aunque la caída es de tal magnitud que recuperar la situación anterior podría requerir dos años.

En opinión de los autores del informe, a diferencia de la crisis financiera, las autoridades económicas han actuado esta vez «con contundencia y rapidez», algo necesario para combatir la profundidad de la misma. De cara a los próximos meses, aseguraron que el retorno a la actividad no va a ser sencillo.

En primer lugar porque, como explicaron, la incertidumbre asociada a la pandemia no ha desaparecido: «la amenaza de un rebrote pende como una espada de Damocles hasta que se consiga finalmente descubrir una vacuna». «El distanciamiento social es una realidad y a la vez un impedimento para recuperar el ritmo de la actividad económica del sector servicios», tan afectado como la producción industrial.

Vaticinaron también que las industrias con largas cadenas de suministro se verán afectadas por la «desigual» desescalada de los estados, con lo que la actividad se verá mermada respecto al pasado. Y advirtieron de que las medidas adoptadas para afrontar la crisis sanitaria, aunque alivian las necesidades de financiación, dejarán «el lastre del endeudamiento con una marcada diferencia en Europa entre los países más y menos endeudados».