El viernes, en la apertura de la reunión de la Junta General de Socios de Elkargi, el lehendakari, Iñigo Urkullu, anunció un “Programa para la Reconstrucción económica y social de Euskadi” que, según afirmó, «va a unir todos nuestros recursos, capacidades y fortalezas para construir un futuro económico y social de progreso y bienestar». Sus bases se aprobarán en el Consejo de Gobierno de mañana martes y, como indicó, prevé poder «comprometer» más de 10.000 millones de euros en cuatro años con el objetivo de recuperar todo el empleo perdido.

Hay que recordar que 10.000 millones son prácticamente el presupuesto de un año del Gobierno de Lakua, que en estos momentos es de 12.113 millones de euros. Mucho dinero aunque se distribuya en cuatro años.

En su discurso de investidura, Iñigo Urkullu habló de un «proyecto para los Fondos ‘Next Generación’ de la Unión Europea, con la ambición de poder movilizar una inversión público-privada de 10.000 millones». Pero en entrevistas de hace unos días, el lehendakari reconoció que habrá que esperar hasta el segundo semestre de 2021 para contar con el dinero que llegará de la Unión Europea, si llega, y ver a qué proyectos se destina.

¿Qué fue de Euskadi Zutik?

El 2 de abril, en una videoconferencia con los portavoces parlamentarios, Urkullu anunció que «el Gobierno Vasco ya trabaja en un Plan Plurianual de Empleo y Reactivación Económica, ‘Euskadi Zutik’». El 8 de junio el viceconsejero de Empleo y Juventud, Marcos Muro, incidía en la misma línea: «Estamos trabajando en el Plan estratégico de Empleo y Reactivación económica que el lehendakari ha titulado ‘Euskadi Zutik’». Pero ‘Euskadi Zutik’ pasó luego a ser el lema electoral del PNV y nada más se ha sabido de este programa.

En los primeros momentos del estado de alarma, el 24 de marzo, el lehendakari compareció públicamente para anunciar «una primera batería de medidas que ascienden a 841 millones de euros». Pero no era oro todo lo que relucía. Por ejemplo, los 568 millones para empresas y autónomo son en su mayoría avales, no dinero contante y sonante, según análisis conocidos por este diario. Y en los 54 millones que se dedicaban a ayudas a las familias se incluía lo que las familias dejaban de pagar por la suspensión de los programas de comedor, transporte escolar, servicios de acompañamiento y haurreskolak, porque estos servicios se habían suspendido.

El programa 1229

A partir del mes de marzo, el Gobierno de Lakua incluye en su presupuesto de 2020 un programa identificado con el número 1229 y denominado con el significativo nombre de «Medidas contra la crisis provocada por el Covid-19». Según el detalle por partidas de la ejecución presupuestaria a fecha del 31 de agosto remitida por el Ejecutivo al Parlamento de Gasteiz, ese programa suma 402.238.542 euros.

De esa enorme cantidad, hasta la fecha del informe se había comprometido el gasto de 122.588.667 euros, lo que supone el 30,47% del total. Y los pagos efectuados habían sido de 80.033.958 euros, lo que no es más que el 19,9%.

Fuentes oficiales del Departamento de Hacienda consultadas por GARA sostienen que estas diferencias se deben a «movimiento contables». Explican que Osakidetza está utilizando en estos momentos su presupuesto inicial, pero que 173 millones de este programa 1229 que están anotados en el capítulo 99 de Diversos Departamentos son para sanidad y tirará de ellos según se acerque el final del año.

Pero en todo caso, si descontáramos de esta cuentas el Departamento de Salud y el de «diversos departamentos», estaríamos hablando de una suma de 220 millones de euros, de los que se han comprometido 112 millones y se han pagado 75 millones, lo que supone un 34%.

Hay puntos que llaman especialmente la atención, como que, por ejemplo, el Departamento de Educación haya tenido durante todo el verano disponibles dos millones de euros para hacer obras menores relacionadas con el covid-19 en los centros de enseñanza y únicamente ha gastado 127.399 euros.