Ramón SOLA
VACIAR LAS CÁRCELES PARA LLENAR EL OBJETIVO DE LA CONVIVENCIA

Sortu: «168 presos tendrían que estar pisando la calle»

168 es un número que en realidad resume un horizonte: ir vaciando cárceles tras los avances en la «humanización» de estos últimos meses. Y es una cifra que refleja también que resulta viable, con la ley ordinaria y un plus de justicia transicional. Sortu apunta al cambio de fase.

Tras una década desde el cambio de ciclo de Aiete, varios años de batalla legal de EPPK y un último curso de deshielo en Madrid, Sortu ve llegada la hora de afrontar un salto cualitativo que se puede resumir así: vaciar cárceles para llenar la convivencia, traer a exiliados y deportados para llevarse el pasado y sus ataduras. Y lo puso ayer sobre la mesa con propuestas concretas y números detallados.

De ello se encargaron Oihana Garmendia y Rufi Etxeberria en una sesión en Donostia retransmitida por streaming. La entrevista –realizada por Ion Telleria (NAIZ Irratia)– se enmarcaba en la conmemoración del Día Internacional de las personas presas por motivos políticos, el sábado, cuando habrá movilizaciones en las capitales de Hego Euskal Herria.

‘Presoen askatasunaren bidean, lorpenak eta erronkak’ era el título de la entrevista pública, por lo que tuvo dos partes bien diferenciadas. Mirando a la segunda, presente y futuro, ambos incidieron en una premisa: culminar un escenario de «convivencia democrática» exige solucionar la situación de las personas represalias. Y es aquí donde viene el salto cualitativo, que Etxeberria propone afrontar «con todas las fuerzas», como anteriores etapas.

Enumerar las cuestiones que mantienen las cárceles es extenso. Garmendia citó por ejemplo que la negativa a descontar condenas cumplidas en otros Estados afecta a 50 presos, de los que 11 quedarían libres inmediatamente si se desactivara la artimaña contra el criterio europeo.

Suprimiendo todo el cúmulo de excepcionalidades, Sortu concluye que «168 presos tendrían que estar pisando la calle», aunque solo fuera con permisos, puesto que han cumplido la cuarta parte preceptiva de la condena. A 134 les correspondería el tercer grado por haber superado ya la mitad. Y 123 estarían en libertad condicional.

«La ley ordinaria debería llevar a casi todos a la puerta de casa», resumió Oihana Garmendia. Consideró que en Euskal Herria «hay voluntad y madurez suficiente» para encararlo. Y añadió que en Madrid y París pasaría por renunciar a las leyes de excepción, y también a lo que no está escrito: «Las prácticas, las inercias». Así, puso en valor que cárceles con resonancias históricas como Herrera de la Mancha ya no tengan presos políticos vascos dentro, pero recordó que ello no supone que estén en casa, sino en otros penales más cercanos.

¿Qué ocurre con quienes quedan fuera de este grupo? Garmendia dijo que en Sortu son conscientes de que la ley ordinaria no solucionaría hoy el problema de quienes tienen largas condenas y porcentajes de cumplimiento aún cortos, pero añadió que existen «esquemas internacionales de justicia transicional» en los que caben «excarcelaciones anticipadas». Se trata, en resumen, de «deshacer toda la arquitectura» construida durante décadas con una intención evidente, en palabras de Etxeberria, de «eternizar» la existencia de presos y otros represaliados políticos.

Vía legal y compromisos

A este nuevo suelo se ha llegado con no pocas dificultades en la década transcurrida desde Aiete. La utilización de la vía legal aprobada por Euskal Preso Politikoen Kolektiboa «está dando resultado», apuntó Rufi Etxeberria, citando efectos como la visualización de «la arbitrariedad de las políticas que se aplican» o el fomento de los lazos con agentes vascos. Y obviamente en estos últimos tiempos se ha probado que «es un camino válido» porque esta lucha ha abierto las puertas a permisos, terceros grados…

Etxeberria quiso matizar aquí que esta vía legal tampoco es estrictamente novedosa, porque siempre se ha practicado, hasta el punto de que el Estado decidió centralizar la Vigilancia Penitenciaria en la Audiencia Nacional para garantizarse así los rechazos a las peticiones de los presos. «Y esta es una realidad que hoy todavía tenemos enfrente», apostilló. Garmendia le agregó la actitud de Juntas de Tratamiento de ciertas cárceles que siguen en una lógica «de guerra» o la de fiscales y jueces que recurren y anulan lo que los presos van logrando.

Pero volvamos a enfocar la nueva fase. Con el salto cualitativo que se propone, ¿no se exigirá a las personas presas también un salto en su aportación? Rufi Etxeberria afrontó esta pregunta recordando primero que no solo EPPK puso por escrito su posición de reconocimiento del daño causado, sino que también la mayoría de los presos la han hecho suya, «por iniciativa propia y no precisamente en las mejores condiciones para ello». En sus escritos se comprometen con una acción exclusivamente política, asumen el daño causado y muestran su empatía con el sufrimiento de las víctimas, reseñó antes de concluir que «eso tiene una profundidad política y ética evidente».

En paralelo afloró la cuestión de los casos pendientes de esclarecer, sobre la que también se mojó Etxeberria. Recordó que la violencia no reconocida ni aclarada es sobre todo la estatal y se preguntó si cuando se formula esta cuestión se hace con ánimo constructivo o solo para «alimentar la represión. Lo que habría que llevar a cabo son políticas constructivas, que no encadenen a la sociedad vasca al pasado. La izquierda abertzale estaría dispuesta a hablar de todo el pasado, pero no solo ella tendría que hacerlo, también los demás, y habría que poner los mecanismos para ello. Los hay en el ámbito internacional. ¿Por qué no una Comisión de la Verdad en Euskal Herria?».

Por cierto, Etxeberria y Garmendia no solo demandaron soluciones para las personas presas sino también para las exiliadas y deportadas. El primero recordó la iniciativa de los exiliados políticos, que en realidad venía ya desde Lizarra-Garazi con un marcado carácter unilateral y que se ha traducido en el retorno de unos 200 de ellos en todos estos años. Sin embargo, hay otros 42 que siguen atrapados por las «trampas» de la Audiencia Nacional al estirar los plazos de prescripción o negar información a los abogados.

En este balance de los últimos años, Garmendia resumió que «se ha comenzado a humanizar la cuestión, pero no es suficiente; hay que resolverla». Y así volvió a saltar de los logros a los retos, de la primera fase en marcha a esa segunda a la que Sortu apunta con determinación, con un terreno ya labrado y en un año de aniversario.

 

«Espetxeetan blokeatu nahi zuten prozesua, baina ez zuten lortu»

Erronka berriak oraingo lorpenak ditu ardatz. Eta oraingo lorpenek, aurretiko apustuak. Horri erreparatu zion Oihana Garmendiak, euskal eragileen arteko akordioez eta herri mobilizazioaz gain EPPKren erabakiak nabarmenduz. Izan ere, «estatuek prozesua espetxeetan blokeatu nahi zuten, baina ez zuten lortu, Kolektiboak jakin zuen hori gainditzen», erresistentzia jarrera alboratuz eta lege bidezko bideak erabiltzearen erronkari aurre eginez. Gogora ekarri zuenez, apustu hori abiatu ostean, egindako hautua «kriminalizatu nahian aritu ziren, urte oso latzak izan ziren, baina EPPK ez zen xede horietatik desbideratu».

Bideak Euskal Herriak emandako bultzadak ireki dituela nabarmendu zuen Rufi Etxeberriak. Nazioarteko komunitateak Aieten egindako enplazamenduari muzin egiteaz gain, estatuek gatazkaren ondorioen alorrean hartutako konpromisoak bertan behera utzi zituztela aipatu zuen. ETAren armagabetzeari jarritako oztopoak ere aski ezagunak dira. «Inolako borondaterik ez zuten, irabazleen eta galtzaileen eskeman sartuak ziren. Baina, horren aurrean, Euskal Herrian eredu propio bat garatzen ari da, zeinean gizarte zibilak zerikusi handia duen», laburbildu zuen. 2021ean blokeo garai hura gainditua da jada. Etxeberriak azaldu zuenez, Parisekin lortutako mintzakidetzak aurrera segitzen du, orain Justizia ministro berriarekin, eta Madrilek akordio politikoen beharrik gabe posizioa aldatzea lortu da, urrunketa arindu eta lehen gradua murrizten hasteko legedia betetzea aski delako.R.S.