M. TXINTXURRETA
DONOSTIA
VÍCTIMAS DEL FRANQUISMO EN GIPUZKOA

La represión más dura fue donde la oposición era más fuerte: Gipuzkoa

Javi Buces investigó para su tesis doctoral las consecuencias de la represión franquista en Gipuzkoa entre 1960 y 1975 y ahora ha publicado el libro titulado «Oposición, represión y graves violaciones de derechos humanos en Gipuzkoa (1960-1975)». Para este trabajo, presentado ayer en Donostia, el historiador ha conseguido identificar a cientos de víctimas.

El historiador Javi Bulces con su libro, ayer en Donostia.
El historiador Javi Bulces con su libro, ayer en Donostia. (Jon URBE | FOKU)

El historiador de la Asociación Aranzadi Javi Buces Cabello (Sevilla, 1982) presentó su tesis a comienzos del verano de 2021, y ahora la ha publicado en forma de libro: “Oposición, represión y graves violaciones de derechos humanos en Gipuzkoa (1960-1975)”. Presentó su nuevo trabajo ayer por la tarde, en la sala San Jerónimo de Donostia.

El libro de Buces rebasa las lindes de la narración histórica y viene a compensar un «déficit democrático», según apuntó su autor a GARA. Ha conseguido identificar a «cientos» de víctimas y los nombres y apellidos de muchas de ellas han quedado reflejados en las páginas del libro. «El objetivo no era tanto contar la historia, sino localizar, con nombres y apellidos, a quienes sufrieron la represión franquista en Gipuzkoa desde 1960 hasta que murió Franco. Pienso que existe un déficit democrático; está muy bien saber datos generales, pero ¿quiénes sufrieron esa represión?», preguntó.

Para poder dar con esos nombres y apellidos, mantuvo varias conversaciones con algunas víctimas, consultó las publicaciones políticas clandestinas de la época… pero, sobre todo, invirtió horas en el Archivo Provincial de Gipuzkoa, en Oñati. Allí, consultó fuentes oficiales de la Guardia Civil y la Policía española. «Estos informes muestran su manera de actuar -explicó-: por ejemplo, si se realizó una manifestación en Hernani, qué hicieron, a cuántas personas detuvieron. Indagando en estas fuentes, ha conseguido identificar a «cientos» de torturados, «cientos» de detenidos, «cientos» de personas juzgadas en el TOP (Tribunal de Orden Público)… y a 21 muertos.

Algunas de esas muertes ocurrieron en dos épocas especialmente duras para Euskal Herria y, en concreto, para Gipuzkoa: 1968, tras la muerte del torturador Melitón Manzanas y 1970, durante el Proceso de Burgos. Los estados de excepción que activó el régimen franquista en torno a estos sucesos derivaron en una «represión directa», según el autor del libro. «En un Estado dictatorial la represión es general, bien contra el euskara, contra la cultura… Pero la represión directa fue muy concreta: buscaban a militantes de ETA, del Partido Comunista, y después de 1968 la represión fue indiscriminada. La mayoría de personas que detuvieron tras la muerte de Manzanas no tenían ninguna relación con el asesinato. En sus fichas ponía ‘nacionalista’ o ‘comunista’, pero los detenidos y torturados no tenían nada que ver con el asesinato. Abrieron el abanico y vino la represión más dura. No solo contra militantes de ETA o del Partido Comunista, sino contra la ciudadanía vasca en general», explicó el historiador.

Además, después del Proceso de Burgos, las situaciones de excepción que implantó Franco duraron más de lo común. Según Buces, desde agosto de 1968 hasta febrero de 1971, los guipuzcoanos y guipuzcoanas estuvieron en estado de excepción durante diez meses. «Esto tiene muchas consecuencias: represión directa, prohibición de salir a la calle, torturas...», detalló.

Segunda fase del franquismo

Buces tenía varias razones para centrarse en un tiempo -1960-1975- y espacio -Gipuzkoa- concretos en la tesis que después ha convertido en libro. Por un lado, el autor advierte un déficit histórico sobre la segunda fase del franquismo, ya que la mayoría de las investigaciones se centran en la Guerra del 36 o, en su defecto, en la posguerra. «Tenemos que recordar que el franquismo fue largo, que no acabó en 1945», insistió el historiador.

Por otro lado, contó que la razón principal que lo empujó a centrarse en Gipuzkoa fue la represión sin igual que sufrió este territorio. «Gipuzkoa fue la provincia más castigada en todo el Estado español», recalcó. El motivo, aclaró, es simple: la oposición «más fuerte» se encontraba allí y, por ello, Franco utilizó «la represión más dura» contra su población.

Según explicó Buces, había dos factores que hacían de Gipuzkoa el territorio más hostil para el franquismo. Había mucha industria y, en consecuencia, una gran cantidad de trabajadores y trabajadoras dispuestas a la lucha social. El sentimiento abertzale, a su vez, estaba más extendido que en las demás provincias vascas, lo que motivó la lucha política. «Las luchas sociales y políticas se unificaron, sobre todo en Gipuzkoa. Entonces, la oposición se fortaleció y sufrió la represión», agregó el historiador sevillano.

La batalla del relato

El punto de partida de la tesis doctoral de Javi Buces fue una hipótesis evidente a primera vista que después confirmó: la represión y la violencia que utilizó el franquismo contra la oposición fue mucho mayor que la de la oposición -que en su mayoría era pacífica, remarcó Buces-, y violó en mayor número y magnitud, con una diferencia abismal, los derechos humanos.

Puede parecer algo obvio pero, en realidad, algunos historiadores «tienden a blanquear el franquismo», advirtió el autor del libro presentado ayer. «Sobre todo el segundo franquismo, porque apareció ETA, porque apareció la oposición que hacía uso de la violencia», añadió.

Por ello, el autor de “Oposición, represión y graves violaciones de derechos humanos en Gipuzkoa (1960-1975)” cree que todavía hoy sigue siendo necesario decir que el franquismo fue una dictadura que utilizó la represión directa hasta el último momento. «La oposición antifranquista más fuerte estaba en Euskal Herra, sobre todo en Gipuzkoa, y la dictadura fue justamente eso, una dictadura», concluyó Javi Buces Cabello.