Iñaki TELLERIA

Fagor debe 16 millones a Hacienda pero «iba cumpliendo los plazos»

El diputado general de Gipuzkoa, Martin Garitano, informó ayer de que Fagor tiene una deuda de 16 millones de euros con la Hacienda de este herrialde. La misma, llegó a ser de 42 millones pero, tras negociar un aplazamiento, se redujo hasta 16 y la cooperativa iba «cumpliendo los plazos» del acuerdo. Reconoció también que la entrada en concurso obligará a «recalcular» el proyecto de Presupuestos para 2014.

Garitano compareció ayer en las Juntas Generales de Gipuzkoa para explicar las actuaciones que la institución foral que preside ha realizado durante el proceso que ha concluido con Fagor Electrodomésticos entrando en concurso de acreedores.

A petición del grupo juntero del PSE, el diputado general informó de que Fagor debe en estos momentos 16 millones a la Hacienda de Gipuzkoa, pero también reconoció que la deuda llegó a ser de 42 millones y que, tras acordar un aplazamiento, ésta se redujo porque la cooperativa «iba cumpliendo los plazos» de pago.

El máximo responsable de la institución foral explicó que, en estos momentos, están a la espera de que el juez designe un administrador concursal. Confesó que prefieren que el elegido sea «uno y no cuatro», para que la burocracia no ralentice los siguientes trámites. Asimismo, expresó su esperanza de que el administrador elegido opte por «separar las distintas unidades de negocio de Fagor para salvar las que sean rentables» y que «el que las rescate sea la Corporación Mondragon y no una multinacional».

Retocar los presupuestos

Garitano reconoció que el problema generado es «muy grave, un auténtico drama, que afecta directamente a 1.800 empleos», a una comarca, y a más de un territorio, e «indirectamente a otras 200 empresas».

Por este motivo, afirmó que la nueva situación obligará a modificar el proyecto de Presupuestos de Gipuzkoa de 2014. «Estamos en plazo para ello y tendremos que realizar un nuevo cálculo por el impacto que la crisis de Fagor va a tener sobre el empleo y sobre el bienestar social de las personas». En este sentido, pidió a los grupos junteros que el esfuerzo presupuestario que haya que realizarse vaya acompañado por un «ejercicio de responsabilidad» y no se recurra a posturas maximalistas «de decir que no se negocia con nosotros. Sabemos que estamos en minoría y que tenemos que negociar, pero la flexibilidad nos incumbe a todos», puntualizó.

El diputado general relató los pasos que desde el Ejecutivo que preside han dado tras tener constancia de la grave situación de Fagor. En primer lugar, con la renegociación de la deuda y, posteriormente, con la acción coordinada con el Gobierno de Gasteiz, las direcciones de Fagor y Corporación Mondragon, así como con los ayuntamientos afectados.

En este contexto, Garitano insistió en que «se evite el protagonismo político», de la misma forma que el diputado de Innovación y Desarrollo Rural, Jon Peli Uriguen, citó las gestiones con los ayuntamientos de Debagoiena y con Garapen (Asociación Vasca de Agencias de Desarrollo), pero insistió en «un trabajo de cocina, que no hay que exponer en los medios».

El consejero de Empleo habla de «articular fondos europeos»

El consejero de Empleo y Políticas Sociales del Gobierno de Gasteiz, Juan María Aburto, hizo referencia ayer a distintas alternativas para la crisis de Fagor como «articular fondos europeos que se han usado en otros casos». En este sentido, agregó que están en relación con la administración del Estado español para solicitar estos fondos así como el desarrollo de un plan comarcal en la zona de Arrasate y Debagoiena «para minimizar la situación que se va a generar». Sin embargo, tras citar algunas opciones, matizó que «no obstante los recursos públicos son limitados».

En declaraciones a ETB, señaló que las instituciones han estado «a la altura de las circunstancias» en la crisis de Fagor, aunque también reconoció que el Ejecutivo autonómico desconoce el «dato concreto» del desempleo que puede provocar el cierre de la empresa. Tras remarcar el papel de las instituciones, advirtió que «el trabajo sigue» y anunció que el Gobierno de Iñigo Urkullu va a estar, «en la medida de lo posible», con una «actitud favorecedora de cualquier proyecto empresarial que pueda surgir con la voluntad de que la actividad económica siga adelante».

En este contexto, recordó que Europa está muy «vigilante con lo que ocurre con las ayudas a empresas» e hizo referencia a que el pasado mes de enero el Ejecutivo de Gasteiz ya se encontró «con un primer plan de viabilidad». «Ahora estábamos dispuestos a implicarnos, pero la empresa ha tomado otra decisión», añadió. Después puntualizó que desde la administración de la CAV han actuado «de manera responsable para intentar salvar la parte del negocio que fuera posible, pensando en que la actividad económica genera empleo». GARA