Miles de opositores se congregaron ayer en el centro de Moscú para exigir la liberación de los presos políticos, en una marcha autorizada por las autoridades de la capital rusa.

Los manifestantes marcharon por los céntricos bulevares y demandaron la liberación de los detenidos durante una manifestación de protesta en la Plaza Bolotnaya de Moscú el 6 de mayo de 2012, que desembocó en violentos enfrentamientos con la Policía. El Ministerio de Interior cifró en unas 2.000 personas las participantes en la protesta de ayer, según la agencia Interfax.

La Fiscalía solicitó el 22 de enero penas de entre 5 y 6 años de prisión para los presuntos participantes en los choques violentos de Bolotnaya. Los ocho opositores son procesados por la Justicia por los desórdenes que estallaron un día antes de que el ahora presidente, Vladimir Putin, fuera investido.