Al menos 30 civiles y 20 soldados afganos han muerto durante los últimos cuatro días en una ofensiva talibán que pretendía tomar el control de un distrito de la provincia de Helmand, en el sur de Afganistán, informó. Los ataques comenzaron el sábado cuando cerca de un millar de talibanes intentaron tomar el control del distrito de Sangin, aunque finalmente las fuerzas de seguridad afganas los lograron repeler. Los talibanes, que fueron expulsados de la zona, perdieron a 35 de los suyos en los ataques, según el portavoz del gobernador provincial, Omar Zwak. Junto a la frontera afgana, en la región paquistaní de Khiber, siete miembros de una misma familia murieron en un ataque aéreo de las Fuerzas Armadas paquistaníes.