Amalur ARTOLA DONOSTIA

Hallan dos varillas grabadas del Magdaleniense en Ezkuzta

La campaña arqueológica de este verano ha «sorprendido» a la Diputación de Gipuzkoa por el hallazgo en la cueva de Ezkuzta de Azpeitia, degradada por el paso humano, de dos varillas del Magdaleniense decoradas con grabados profundos similares a las encontradas en Izturitze. En opinión de los investigadores, se trata de unas «piezas de calidad excepcional» y remarcan que son las únicas que se han encontrado completas en la Península Ibérica.

La diputada de Kultura Ikerne Badiola, el alcalde de Azpeitia Eneko Etxeberria y María Jose Iriarte Chiapusso, del Grupo de Investigación de Prehistoria de Ikerbasque y miembro de Aranzadi, ofrecieron ayer una rueda de prensa para dar cuenta del resultado de las excavaciones arqueológicas de este verano, campaña de la que destacaron el hallazgo en la cueva de Ezkuzta de Azpeitia de dos varillas grabadas completas pertenecientes al periodo Magdaleniense medio. La cueva de Ezkuzta, hallada en 1979 por Antxieta Jakintza Taldea de Azpeitia, se encuentra alterada por diversas afecciones de origen humano que han incidido en su depósito sedimentario por lo que, según señaló la diputada, «nadie esperaba encontrar algo así; ha sido una gran sorpresa».

Iriarte fue la encargada de explicar las características del hallazgo. Resumió que se trata de dos varillas completas decoradas con grabados profundos que entroncan con la tradición cultural de las varillas isturitzenses, piezas características de este yacimiento de Nafarroa Beherea. La investigadora relató que en la cueva han encontrado restos de fauna, una gran representación de industria lítica realizada fundamentalmente en sílex y objetos de adorno, sobre todo conchas. Narró que, en el caso de la industria osea, lo más relevante son estas varillas, de hace 14.500 años y realizadas a partir de un cuerno «probablemente de ciervo o reno» que, «en principio, no parece que tuvieran un uso útil», lo que las convierte en objetos ornamentales.

«Hay unas pocas varillas de este tipo también en la cornisa cantábrica, pero estas son las únicas completas de toda la Península Ibérica y, sobre todo, se relacionan con todos los yacimientos del norte de los Pirineos», destacó Iriarte, a la par que mostraba varios ejemplos de varillas similares encontradas en Izturitze y remarcaba la unión cultural entre ambas regiones. De las dos encontradas en Azpeitia, la primera muestra unas haces en líneas que tienen un trazado curvilíneo y espacios en blanco que forman parte de la decoración. La segunda muestra trazos circulares y espirales separados por una raya imaginaria que, en el caso de las encontradas en Izturitze, aparece en relieve. La parte de abajo de ambas varillas es plana. Iriarte destacó la dificultad técnica de los grabados y remarcó que «tenían un gran concepto artístico incluso desde la concepción previa de la obra».

El alcalde de Azpeitia, por su parte, matizó que la primera varilla la encontró hace dos años Javier Lazkano, de la asociación Antxieta -cuyo «arduo trabajo de prospección» fue aplaudido por los investigadores-, pero que lo han mantenido en secreto «por miedo a posibles saqueos». Añadió que el reto está en «conseguir la protección que se merece».

Sin respuesta de Praileaitz

Por su parte, la diputada recordó que la campaña de este año ha contado con 19 excavaciones repartidas por toda Gipuzkoa y se refirió especialmente a Praileaitz para destacar que, a pesar de que el hallazgo de la segunda entrada a la cueva ha demostrado que el yacimiento es «más complejo de lo que pensábamos», todavía no han recibido respuesta alguna por parte del Gobierno de Gasteiz sobre el aumento o no del perímetro de seguridad: «Nos parece realmente grave; no se ha hecho nada y es necesario aumentar el perímetro de seguridad», enfatizó.

Así, destacó que la Diputación destinará el próximo año 100.000 euros íntegros para el yacimiento de Praileaitz y aumentará también la partida destinada a las demás excavaciones arqueológicas.

Arranca el Festival de Cine Arqueológico del Bidasoa

El Festival Internacional de Cine Arqueológico del Bidasoa, FICAB, se celebrará del 14 al 22 de este mes con una sesión inaugural que, como novedad, se celebrará en el Aquarium de Donostia. Los otros dos escenarios donde se proyectarán las 19 películas que compiten en la edición de este año son el renovado auditorio del centro cultural Amaia y Ficoba, ambos en Irun. Las cintas, según anunciaron ayer, ofrecen «un panorama muy representativo del patrimonio arqueológico mundial» y destacaron que esta edición será la primera en presentar producciones de Australia y Malasia.

La sesión de clausura y entrega de premios tendrá lugar el sábado 22, a las 20.00 en el Museo Romano Oiasso de Irun, y contará con la participación del grupo de cuerda Kamerata Oiasso, que se estrenará como formación en un concierto que contará con obras de Villalobos y Piazzola, entre otros.

Este año el FICAB también se podrá seguir por Internet, mediante su página web www.ficab.org. GARA