Joseba SALBADOR

La Diputación ultima un preacuerdo para mantener la producción en Candy

La Diputación de Gipuzkoa trabaja intensamente para cerrar un preacuerdo que permita mantener la producción de la empresa Candy de Bergara. Según ha podido saber este diario, fruto de estas gestiones la multinacional se habría comprometido a prolongar la actividad durante unos meses, mientras la institución foral se encargaría de reformular el proyecto industrial. La financiación vendría de un fondo creado con las cantidades destinadas a indemnizaciones.

Las calles de Bergara fueron escenario ayer tarde de otra multitudinaria manifestación contra el cierre de la empresa Candy Hoover de Bergara, la víspera del fin del periodo de consultas del ERE de extinción anunciado por sus propietarios para trasladar la producción a China, lo que supondrá el despido de más de 150 trabajadores.

Al término de la manifestación, portavoces del comité de empresa dieron lectura a un comunicado en el que reiteraron que «todavía vemos la necesidad de seguir luchando» con el fin de que la planta de Bergara pueda seguir fabricando lavadoras, algo en lo que se mostraron convencidos ya que «la fábrica es rentable, tal y como está quedando demostrado en las reuniones que hemos mantenido».

En este sentido, los trabajadores desvelaron que están trabajando junto con la Diputación de Gipuzkoa en un plan para garantizar la continuidad de la planta de Bergara, y anunciaron que «vamos a hacer todo lo que esté en nuestras manos» para contribuir a ello, al tiempo que emplazaban a la empresa a «clarificar su postura».

Según ha podido saber este diario, el plan pasaría por el compromiso inicial de la multinacional de posponer el traslado de la producción a China, de tal forma que mantendría la actividad durante unos meses. Mientras tanto, el Departamento de Innovación de la Diputación de Gipuzkoa se encargaría de reformular el actual proyecto industrial, mediante la entrada de un nuevo grupo empresarial que podría pertenecer o no al sector de los electrodomésticos.

La financiación de este plan vendría de un fondo creado con las cantidades destinadas a las indemnizaciones de los trabajadores que, en su mayoría, estarían dispuestos a utilizar ese dinero para el relanzamiento de la empresa, aunque existiría la posibilidad de desvincularse del proyecto en el caso, por ejemplo, de trabajadores con edades cercanas a la jubilación.

Aunque a día de ayer todavía existían diferencias entre las partes implicadas -Diputación, dirección y plantilla-, el comité de empresa se volverá a reunir hoy con la dirección y a lo largo de la jornada podrían conocerse más detalles de este plan, que abriría un nuevo escenario el día en que precisamente finaliza el periodo de consultas del ERE de extinción de contratos.

En el transcurso de ese periodo, la multinacional italiana ha insistido en el cierre de la planta y en el pago de indemnizaciones «por encima de los 20 días por año trabajado que establece la legislación».

Los trabajadores, sin embargo, han acusado a la empresa de estar «maquillando los datos y ocultando beneficios» para hacer creer que la planta de Bergara no es viable y justificar su traslado a China. Por ello, han venido exigiendo que se les faciliten las cuentas del entramado de empresas que conforman el grupo, ya que Candy de Bergara mantiene transacciones económicas con otras 28 sociedades, alguna de ellas con sede en Luxemburgo.

Propuesta para cerrar el conflicto en Laminaciones Arregui

ELA, LAB y ESK anunciaron ayer el inicio de contactos con la Diputación de Araba, el Gobierno de Gasteiz y los partidos políticos, con el objetivo de impulsar una mesa «con todos los agentes posibles» que posibilite alcanzar un acuerdo que cierre el conflicto de Laminaciones Arregui.

Según explicaron las centrales en una rueda de prensa, tras las sentencias donde se declaran nulos los despidos llevados a cabo en el ERE de extinción del año 2012, la empresa está obligada a readmitir a los trabajadores que aún mantenían las demandas abiertas contra ella. De esta manera, y a partir de enero, los empleados recuperarán sus puestos de trabajo.

Tras insistir en que «ninguna sentencia por sí misma va a cerrar el conflicto», subrayaron que «solo un acuerdo hará posible que acabe este eterno y desgraciado episodio». Por ello, plantean un plan industrial, una única plantilla, readmisiones con garantía, y «voluntariedad» en el caso de excedente de personal. GARA