Horas y horas de trabajo dedica Ibero en su empresa Virtualan a recrear lugares históricos o preparar videojuegos ambientados en el pasado, como ‘Valete vos viatores’, tanto con fines turísticos, como divulgativos. Unas fórmulas que conforman un lenguaje cercano a la juventud y que puede resultar muy útil para acercar en especial a ese grupo de población «la cultura y la historia».

¿Cómo se inició en el modelado 3D?

Me gradué en la carrera de diseño y desarrollo de videojuegos. Ahí, precisamente, me di cuenta de que la parte que más me gustaba era el diseño 3D. Por ello, sabiendo la parte del diseño que más me gustaba, realicé un máster de VFX para cine, televisión y publicidad. Eso me dio la oportunidad de trabajar en grandes producciones a nivel mundial, tanto en series como en cine.

¿Cómo terminó trabajando en la exitosa serie ‘Juego de Tronos’?

Después de haberme formado en Efectos Visuales VFX, fui a trabajar a El Ranchito, una empresa dedicada a los efectos visuales que participa habitualmente en grandes proyectos internacionales. Recuerdo que a las pocas semanas después de llegar y entre todos los equipos que estaban trabajando en los distintos proyectos, a mí me incorporaron al de ‘Juego de Tronos’. Formé parte, concretamente, del equipo de modeladores en 3D, que era mi especialidad.

¿Qué recuerdos le ha dejado esa experiencia?

Nuestro trabajo se centraba en crear digitalmente todo aquello que en la realidad resulta muy complicado o directamente imposible de reproducir; todo tipo de objetos, elementos, entornos y seres animados prácticamente desde cero. Desde el departamento de producción, nos llegaban las imágenes de rodaje y nos indicaban qué querían que apareciera en el croma, es decir, en esa superficie ‘verde’ sin imagen ‘física’ a la que se incorporan las imágenes generadas digitalmente por ordenador. Uno de los retos más importantes, recuerdo, fue la creación de los caballos de los caminantes blancos. Tuvimos que crear digitalmente unos caballos en estado de descomposición, donde se veían las pieles y huesos al aire libre; todo esto, con las mismas proporciones que los caballos reales del rodaje sobre los que montaban los actores. Esta escena nos llevó un mes de trabajo.

Otro elemento que tuve que realizar digitalmente para el capítulo fue la lanza que mata al dragón. En la grabación en el set de rodaje no era posible lanzarla a esa velocidad y mucho menos que impactara contra un dragón, por lo que la solución pasaba por hacer una réplica exacta digitalmente. Recuerdo que para los planos que teníamos que desarrollar nos pedían un nivel altísimo de detalle, incluso detalles que pasan desapercibidos para el espectador.

Todo ese trabajo mereció la pena, ya que el capítulo (episodio 6 de la temporada 7, ‘Más allá del muro’) en el que realicé estas creaciones digitales recibió el premio Emmy a mejores efectos visuales en 2018.

Fue una experiencia muy positiva en todos los sentidos. Una oportunidad de la que aprendí mucho y me puse a prueba a mí mismo. Es una gran satisfacción haber trabajado en una serie mundial, que tanta gente ha visto. Alguna vez me ha tocado escuchar por la calle a gente hablar de las cosas que hice para el capítulo y eso es algo muy bonito. Y el hecho de que ganáramos un Emmy le da un plus de valor a la experiencia.

De la televisión pasó a la recreación histórica. ¿Qué le animó a realizar ese cambio?

Desde pequeño me ha gustado todo lo relacionado con el patrimonio cultural, la historia, arqueología… por eso, mientras estaba trabajando en el sector audiovisual, se me ocurrió juntar mis dos pasiones. De esa idea, nació Virtualan.es, empresa especializada en la virtualización del patrimonio en 3D. Mi idea principal, y la de mi empresa, es contribuir a la puesta en valor y divulgación de nuestro patrimonio. Las recreaciones que realizamos permiten a las personas explorar monumentos, yacimientos y entornos que, de otra manera, podrían ser difíciles de acceder debido a su ubicación geográfica o estado de conservación. Además, también pueden ser utilizados no solo para fines culturales o de turismo, sino también para fines educativos, ayudando a los estudiantes a comprender mejor la historia y nuestro patrimonio. Esos objetivos son los que tenemos siempre en mente en cada uno de nuestros proyectos.

¿De qué lugares ha hecho hasta el momento una recreación histórica?

En Virtualan, hemos realizado recreaciones en varios lugares. De las más recientes, fue la recreación que realicé en la edición portuguesa de ‘National Geographic’, A Lusitania romana. Tiene una serie de imágenes de varias recreaciones en 3D, como el templo de Idanha (Portugal), el exterior de un taller de cantería y alguna imagen de una recreación del interior de una domus romana. También hemos hecho recreación del castillo de Irulegi, el Castillón de Sangüesa, el anfiteatro de Burdeos, el museo de San Miguel de Aralar, la vía Appia, el torreón de Serantes, varios dólmenes que corresponden a una ruta (Irukurutzeta, Agirreburu, Gizaburuaga), el castillo de Gazteluzar y Santa Criz de Eslava.

¿Qué pasos tiene que ir dando hasta obtener un resultado final que nos permite, por ejemplo, conocer en detalle la ciudad romana de Santa Criz?

Lo primero de todo, es importante hablar con el cliente o responsable de la recreación que vamos a llevar a cabo para entender qué es lo que quieren poner en valor. Después, atendiendo a su solicitud, realizamos un estudio para determinar cuál es el mejor formato o soporte, además de la mejor forma de divulgación. Por ejemplo, el planteamiento será distinto si queremos realizar un video para redes sociales, para un museo, o si va a tratarse de un contenido que irá implementado en una pantalla táctil.

Después, llega la fase de documentación. Por ejemplo, en el caso de Santa Criz de Eslava, lo más importante era tener una planimetría (un plano que nos indique cómo era la ciudad y dónde estaban los edificios) en base a los hallazgos encontrados hasta el momento y toda la información histórica e interpretación de la orografía del lugar para establecer una idea de cómo pudo haber sido la ciudad en la época. En este punto es fundamental la documentación histórico-arqueológica, además de las indicaciones e interpretación de los propios arqueólogos.

Una vez obtenemos toda la información en cuanto a disposición de la ciudad, tipo y apariencia de los edificios, de qué materiales estaban construidos, calles…, pasamos a la creación digital en 3D. Los elementos en 3D que se realizan para una recreación tienen que estar en constante supervisión por los historiadores para que el trabajo tenga el mayor grado de realismo y fidelización histórica.

Una vez realizamos los modelos 3D, pasamos a la llamada texturización, proceso donde agregamos textura y color a los materiales de forma adecuada a cada elemento.

Al finalizar este proceso, comenzamos con la creación del entorno. Utilizando técnicas vanguardistas, como fotogrametría realizada con vuelos de dron o mapas de GIS (un sistema de información geográfica que recopila, gestiona y analiza información) para la creación de amplios terrenos y ambientación de los mismos. De esta manera, obtenemos un modelo digital del terreno en la actualidad. Esto nos ayuda como base para luego modificarlo y reconvertir el terreno actual al terreno que pudo haber en el pasado.

Después de realizar el terreno, comenzamos a colocar los elementos 3D en ese espacio. Agregamos elementos decorativos que nos aporten un mayor grado de inmersión en la recreación, como, por ejemplo, personajes.

Y para finalizar, realizamos una labor de iluminación que nos aporte una mayor calidad visual, que nos proporcione más realismo y que el espectador pueda disfrutar de ello.

¿Cuántas horas de trabajo hay detrás de una recreación de este estilo?

La cantidad de horas que se meten en conjunto para una recreación de este estilo realmente no podría cuantificarlas, pero son muchas, ya que el grado de detalle y acabado final que realizamos requiere mucho trabajo. Los proyectos, desde su planificación, suelen durar varios meses.

Además, ha realizado el videojuego ‘Valete vos viatores’ ambientado en la época romana. ¿Esta fórmula resulta especialmente interesante para acercar de una manera más atractiva la historia a la juventud?

Creemos que los videojuegos también pueden ser utilizados para fines educativos. Hemos visto que, con el juego ‘Valete vos viatores’, donde te conviertes en un artesano en la época romana y puedes completar misiones o simplemente pasear por sus calles, la respuesta general ha sido muy positiva.

La juventud entiende este lenguaje digital, el del videojuego. Por ello, queremos utilizarlo en conjunto con los diferentes departamentos de educación, como herramienta de divulgación y aprendizaje, y así, acercar la cultura y la historia a la juventud.

¿Qué otros proyectos de lugares históricos tiene previsto recrear?

Pronto veremos la recreación de uno de los castillos más emblemáticos de Nafarroa. Aparte, desde Virtualan, vamos a realizar una propuesta innovadora para la recreación de lugares históricos con fines turísticos y educativos.