Alaia Sierra

Visita a Lezetxiki, para «demostrar que no ha habido daño ninguno» por las obras del TAV

Con el fin de «demostrar que no ha habido ningún daño causado por las obras del Tren de Alta Velocidad», la Diputación Foral de Gipuzkoa ha organizado este sábado una visita guiada al yacimiento arqueológico de Lezetxiki, a la entrada de la cueva dañada por las obras.

Alvaro Arrizabalaga, mostrando el yacimiento de Lezetxiki.
Alvaro Arrizabalaga, mostrando el yacimiento de Lezetxiki. (Aritz LOIOLA | FOKU)

La cueva Lezetxiki, en Arrasate, saltó a la palestra el pasado mes de febrero cuando un grupo de espeleólogos denunció que las obras del Tren de Alta Velocidad (TAV) habían dañado una de las galerías que conforman el conjunto de cuevas. Ante ello, tanto el Gobierno de Lakua como la Diputación de Gipuzkoa respondieron que las obras del TAV no han causado daños en la parte protegida, esto es, en el yacimiento arqueológido que se encuentra a la entrada.

Este sábado por la mañana, una treintena de personas han acudido a una visita guiada al yacimiento organizada por la Diputación para, según la propia institución, «demostrar que no ha habido ningún daño causado por las obras del Tren de Alta Velocidad».

En la misma, Alvaro Arrizabalaga, director de las excavaciones e investigador de la UPV y miembro de Aranzadi -que ha señalado en el mapa espeleológico el punto en el que «ha ocurrido el problema con las obras del TAV»- y Maria José Iriarte, investigadora de la UPV, han mostrado el yacimiento y explicado los trabajos de excavación e investigación que se vienen llevando a cabo desde 1996.

Hallazgos

Las primeras exploraciones en esta cueva situada en el barrio de Garagartza se hicieron entre 1936 y 1968 de la mano de Joxe Migel Barandiaran. Fue en esa época cuando se encontró el resto más destacado: un húmero con una antigüedad mínima de 164.000 años que seguramente perteneciera a una mujer.

Ya en la excavación de este siglo, han encontrado dientes de neandertales y objetos de adorno, entre otras cosas. Así, destacan que en Lezetxiki han aparecido restos de cuatro primates: el homo heidelbergensis, el neandertal, el homo sapiens y un macaco. Los restos de este último son los más recientes de un mono que se han hallado hasta ahora en la Península Ibérica.

«Un bien público»

Según ha recordado Arrizabalaga, el yacimiento de Lezetxiki fue declarado Bien Cultural de Protección Especial en verano del año pasado por el Gobierno de Lakua. Ahora, según considera el investigador, «es necesario que la Diputación Foral de Gipuzkoa, el Ayuntamiento de Arrasate y el Gobierno de Lakua trabajen de manera conjunta» para que se valore la opción de abrirlo a visitas o se instale un centro de interpretación.

«Este yacimiento es público, no es nuestro. Si pertenece a alguien es a los vecinos de Arrasate, que tienen que ser proactivos para que se pueda gestionar», ha dicho. Ha añadido que en muchas ocasiones se ha encontrado con trabas por parte de las instituciones para dar a conocer el patrimonio arqueológico de los alrededores de Arrasate. «Si fuera por mí, aquí se harían muchas cosas», ha concluido.