Ruben NIETO
GASTEIZ

Viñetas para reivindicar una década activista y artística

«50 gramos de amonal y ardor juvenil. Gaztegineko portada bitxiak» es el contundente y directo título de la exposición que acoge el local de la Asociación Orbain en Gasteiz. Una colección de obras del mítico dibujante gasteiztarra Roberto Landa, Mundina, que reflejan a la perfección la filosofía y actitud punk que este colectivo quiere reconocer, reivindicar y promover con su nacimiento. La muestra podrá ser visitada hasta setiembre.

Desde este pasado viernes, Orbain Kultur Elkartea nos propone una exposición para agitar conciencias. Para recordar y poner en valor un tiempo. Una «época activista y contestataria» como nos la describe su protagonista, el dibujante gasteiztarra Roberto Landa, Mundina. No es una exposición al uso. Más bien, es una recreación de aquellos años, los 90, en los que un suplemento juvenil como “Gaztegin” servía de catalizador de aquella energía social y juvenil. En su opinión, «una mezcla de música, política, actividades juveniles, acción-represión-acción, denuncia, arte, manis y hostias, y humor, mucho humor, para como estaban las cosas en the streets».

Mundina reflexiona sobre estas y otras cuestiones. No es amante de la oratoria prolongada y autocomplaciente. Por ello, arroja su creación sobre el papel sin autocensuras. Ha querido acompañar su exposición con un pequeño texto en el que nos detalla sin medias tintas cómo vivió la década. «A mí me llamaban al teléfono fijo de casa de mis progenitores, me explicaban cuál iba a ser el tema prinicipal, dibujaba lo que se me ocurría (para bien o para mal) y el dibujo lo llevaba mi madre a la redacción de ‘Egin’ porque trabajaba por allí cerca y yo tengo momentos de vaguedad absoluta», reconoce.

Su técnica era totalmente manual, lejos de los ordenadores que hoy se hacen presentes en cualquier proyecto creativo. «Hacía casi todo a mano, con acuarelas, gouache, tintas y otros materiales que tenía perfectamente desordenados en la mesa de dibujo».

La ambientación es perfecta para una exposición sin complejos como esta. El local de Orbain es histórico. Un referente social y musical durante muchísimos años en Gasteiz, en la calle Bruno Villarreal. La colección recoge numerosas portadas de “Gaztegin”, algunos originales (prescritos) de la época, y alguna cosa de “Ardi Beltza” y “Kale Gorria”, que como recuerda Mundina, «al igual que ‘Egin’, también los cerraron».

«Estuve unos cuantos años haciendo portadas e ilustraciones varias para artículos que actualmente no pasarían la censura política de los tribunales de excepción», recuerda con orgullo. Y denuncia con contundencia los cierres de “Egin”, y por lo tanto “Gaztegin”. Como Orbain Kultur Elkartea, que con la muestra espera contribuir a que recordemos ciertas épocas y acontecimientos clarificadores para entender nuestro presente.

La exposición fue abierta el pasado viernes con un sencillo acto. Un encuentro entre cervezas y ganchitos, en el que los socios de Orbain y referentes del mundo asociativo y popular de Gasteiz se dieron cita en una tarde llena de complicidades. Junto a la exposición, también fue inaugurado el mural decorativo de la propia sede, marca del propio Mundina también.

En dos breves intervenciones, tanto Iker Zubia, presidente de Orbain, como el propio protagonista de la muestra, recordaron que detrás de los cierres de “Egin” y “Gaztegin” hay responsables. Y consecuencias, con personas procesadas y todavía encarceladas como el gasteiztarra Txema Matanzas. Por ello, para Orbain la exposición es una denuncia de los ataques a la libertad de expresión que ha vivido este pueblo. Podrá ser visitada todos los jueves, viernes y sábados de 19.00 a 22.00, hasta el próximo 18 de setiembre. Y para los próximos meses, anuncian nuevos actos relacionados con la misma.

Un proyecto integral e íntegro

El presidente de Orbain Kultur Elkartea, Iker Zubia, se manifiesta sin tapujos a la hora de explicarnos qué es este colectivo. «Nacemos para profundizar en el legado cultural, político y social del punk rock en Euskal Herria, para avanzar en su reconocimiento», y por ello añade que «vamos a trabajar para que se reconozca como se debe a Sebastian Iradier o Donnay pero también a Cicatriz, Eskorbuto o los RIP».

Esta nueva asociación cultural se presentó en sociedad hace algunas semanas, aunque su actividad echó a andar en julio pasado. Desde entonces se han realizado una veintena de actividades entre conciertos, teatro, exposiciones y una charla con el anarquista Lucio Urtubia. En el mes de mayo también tienen programados al menos cuatro conciertos y alguna charla. Y en los próximos meses la agenda de Orbain seguirá repleta con más actividades, entre la que destaca la iniciativa “Local 0”, una plataforma donde presentar en público las iniciativas artísticas locales de Gasteiz.

Orbain cuenta hasta la fecha con 80 socios, y su actividad se basa en la autogestión y autosuficiencia; sin dependencias, ni controles externos a su actividad. «Nuestro objetivo es hacer. Hacer lo que queremos. Hacer lo que nos gusta. Hacerlo desde el pueblo y para el pueblo», añaden. R.N.