11 SEPT. 2016 PANORAMIKA Década IKER FIDALGO ALDAY {{^data.noClicksRemaining}} Pour lire cet article inscrivez-vous gratuitement ou abonnez-vous Déjà enregistré? Se connecter INSCRIVEZ-VOUS POUR LIRE {{/data.noClicksRemaining}} {{#data.noClicksRemaining}} Vous n'avez plus de clics Souscrire {{/data.noClicksRemaining}} Desde las primeras experiencias de la cámara oscura hasta la posibilidad de registro y circulación casi instantánea que permiten las tecnologías actuales, la fotografía es testigo de nuestro tiempo y encuentra su espacio propio adaptándose a cada nueva era. En su faceta más básica, son los enigmas de la óptica y la química los que ocupan cientos de páginas respecto a la evolución tecnológica. Con el avance de los tiempos es su capacidad de registro documental y periodístico e incluso su posibilidad estética y expresiva la que la ha nutrido de múltiples recorridos posibles. Los avances de la tecnología de la imagen provocan constantes cambios en la relación con la creación visual. Nuestra posición como receptores nos sitúa a medio camino entre el consumo y la producción y es el concepto prosumidor el que da nombre a este espacio híbrido. El amateurismo no solo propone nuevas formas de creación y difusión a través de las redes sociales (Instagram nace en el año 2010 y hoy es una de las aplicaciones más utilizadas) sino que varía a su vez nuestra forma de interacción con ellas, moviéndonos en espacios difusos entre la instantaneidad, la sobreproducción y el olvido. Es por eso que nuestra página de hoy propone revisar de forma monográfica la propuesta que Getxophoto ha preparado para la décima edición de su festival, que adopta el tiempo como tema central. El evento impulsado por el colectivo Begihandi presenta de forma novedosa un equipo comisarial encabezado por Jokin Aspuru en colaboración con los que han sido hasta ahora los tres comisarios del festival: Alejandro Castellote, Frank Kalero y Christian Caujolle. Desde su inauguración el 1 de setiembre hasta el 2 de octubre, serán varias las actividades que conforman el grueso del programa y la interacción con el barrio de Algorta será de nuevo la seña de identidad del evento. Esta peculiaridad añade nuevos lenguajes y matices al trascender del espacio inocuo de la galería y enfrentarse a la idiosincrasia del espacio público desde soportes y recorridos que dan forma a la propuesta expositiva. El tiempo aparece de nuevo como uno de los grandes temas del arte. La delicadeza que la serie “Soap” (Jabón) desde la que el fotógrafo Bohnchang Koo (Seúl, 1953) propone la huella visible de lo cotidiano, contrasta con las grandes marabuntas de paseantes que Matthew Pillsbury (Estado francés, 1973) registra como manchas difusas que ocupan, pasean y habitan museos, calles y edificios. Por su parte, Amit Sha’al (Tel Aviv, 1974) realiza una búsqueda comparativa entre fotografías antiguas de diferentes espacios urbanos creando composiciones en la que ambas épocas aparecen representadas en el mismo registro, mientras el sobrecogedor poder de la naturaleza se presenta ante nuestros ojos con la serie que Rachel Sussman (EEUU, 1975) crea en torno a organismos vivos de más de 2.000 años de antigüedad proponiendo una toma de conciencia ante la insolencia dominadora de los seres humanos. Así hasta un total de veinte muestras que, sumadas a un nutrido programa de actividades complementarias, dan buena cuenta de esta edición tan especial de uno de los festivales más importantes de nuestro contexto.