30 AVR. 2017 MOTOR Los todocamino de lujo toman Nueva York joseba Eizagirre El Salón del Automóvil de Nueva York es el preferido por los fabricantes para presentar sus novedades en el segmento de los coches de lujo y grandes todocaminos, ya que la Gran Manzana es el mayor mercado del país para este tipo de vehículos. Conscientes de ello, han sido numerosos los fabricantes europeos que han presentado allí sus principales novedades en este segmento, como Mercedes, que acudía al salón con el AMG GLC 63 y sus variantes Coupé y S Coupé, con potencias de 470 y 500 caballos. Esta última versión acelera de cero a cien en 3,7 segundos, pese a su tamaño y condición de vehículo todocamino. Jaguar y Land Rover tienen también en Estados Unidos un importante mercado y es por ello que las dos marcas británicas siempre hacen un gran despliegue en la muestra neoyorquina. En el caso de Land Rover, con el Range Rover Velar, un todocamino de lujo que no renuncia a sus buenas posibilidades camperas. Y en el caso de Jaguar, con el F-Pace, el primer todocamino de la marca británica y que obtenía precisamente el premio al Coche del Año en el Mundo 2017, el galardón más prestigioso del sector, imponiéndose a otros finalistas como el Audi Q5 o el Volkswagen Tiguan. Otra marca europea que busca también crecer en Estados Unidos es Alfa Romeo, que ha llevado a la ciudad de los rascacielos el Stelvio, la propuesta que la legendaria marca italiana hace para el segmento del todocamino de lujo y el primer modelo de este tipo que la marca fabrica en toda su historia. En Nueva York se expuso la versión más potente, el Quadfriofoglio Verde, que cuenta con un motor V6 biturbo de origen Ferrari y 510 caballos de potencia, aunque en nuestro mercado también habrá motorizaciones diésel de 180 y 210 CV, y una variante de gasolina de 280 CV. Otra de las marcas integradas en el grupo FCA junto a Alfa Romeo es Jeep, que presentaba la variante más potente jamás fabricada del Grand Cherokee. Se trata del Track Hawk, que esconde bajo su capó un propulsor V8 de 6,2 litros sobrealimentado que proporciona 707 caballos, lo que le convierte en el SUV más potente jamás fabricado. Esta mole es capaz de acelerar de cero a cien en 3,5 segundos. En cuanto a la marca Dodge, también integrada en el grupo Fiat-Chrysler, lo más destacable ha sido la recuperación de la etiqueta Demon con el Challenger SRT Demon, un espectacular deportivo con un motor V8 sobrealimentado que proporciona nada menos que 840 caballos. Se trata de una declaración de intenciones de lo que puede hacer una marca como esta en busca de la deportividad máxima. Pero para potencia, la del fabricante sueco de superdeportivos Koenigsegg, que desvelaba en EEUU su última creación, el Agera RS1 dotado con un motor en V8 y que desarrolla 1.360 CV de potencia, con los que consigue acelerar de cero a cien en 2,8 segundos. Entre los productores norteamericanos destacaba asimismo Ford, que ha dado un nuevo impulso a su marca de vehículos premium, Lincoln, con el nuevo Navigator, un todocamino grande y de lujo que se posiciona como el buque insignia de la marca. Y Buick, la marca de gama alta de General Motors (GM), reveló el Enclave Avenir, un SUV grande con el que el fabricante abre un nuevo capítulo en su historia. A partir de ahora, Avenir será una submarca que designará los vehículos más exclusivos del fabricante. Porsche es otra de las casas que nunca falta a esta convocatoria, en este caso para mostrar su última gran novedad, el Panamera Sport Turismo, un Panamera familiar pero con el estilo propio de Porsche. Maserati, por su parte, acudía con el primer deportivo SUV de lujo, el Levante, con un motor diésel V6 de 275 caballos y una suspensión neumática de altura regulable. Continuando con las marcas europeas, debutaba el Audi RS 3 2018, desarrollado específicamente para EEUU y que cuenta con un motor turbo de 5 cilindros y 2,5 litros que genera 400 CV de potencia y puede acelerar de cero a cien en 3,9 segundos. La marca Mini, que tiene también una buena aceptación en el mercado norteamericano, presentaba la variante más potente del Countryman, la John Cooper Works, con 231 caballos de potencia. Y Volvo acudía a la cita neoyorquina con el V90 Cross Country, un modelo basado en la variante de carrocería familiar, de larga tradición en la marca sueca, así como con el XC60, el modelo todocamino que en los próximos meses se verá acompañado por las variantes berlina y familiar, siguiendo los pasos de su hermano mayor. Lexus, Infiniti y Subaru. Entre las marcas asiáticas, Lexus (Toyota) continúa con su ofensiva en el segmento de las berlinas de lujo y tras la presentación en Detroit, en enero pasado, del nuevo y espectacular Lexus 500 LS, y de la variante híbrida, el LS 500h en el Salón de Ginebra, en Nueva York desvelaba la tercera variante de esta berlina grande, el Lexus 500 LS F-Sport, con un estilo más deportivo. Y también en forma de prototipo, Subaru mostraba el Ascent, un SUV de grandes dimensiones, con tres filas de asientos y que también anticipa el vehículo de producción que Subaru tiene previsto lanzar en 2018, con un nuevo motor turboalimentado boxer. Los productores que rompieron la norma de estrenos con vehículos más «de calle» fueron los surcoreanos Hyundai y Kia. Hyundai reservó para Nueva York la nueva generación de la berlina Sonata, una versión más refinada y elegante del clásico vehículo. Y Kia lanzó en Manhattan el subcompacto Río 2018, un vehículo con el que la marca quiere seguir atrayendo jóvenes que están buscando su primer coche.