08 DéC. 2024 CONSUMO Timos «solidarios» Berta García Las estafas y los timos en nombre de la solidaridad abundan, y más en estas fechas prenavideñas. Está pasando ahora con los desastres ocasionados por la DANA pero, en general, la martingala se viene utilizando ya desde hace años, léase falsas participaciones de lotería, donativos para países pobres y/o invadidos, etc. Y es que los amigos de lo ajeno son hábiles y se ponen al día rápido y con soltura, tanto por internet y Whatsapp, como con Bizum y por las redes sociales. Si se quiere ejercer la solidaridad a través de internet, la primera recomendación es hacerlo siempre utilizando las páginas oficiales que tengan las distintas instituciones humanitarias como Cáritas, Cruz Roja, ONGs, etc. Las páginas seguras comienzan por https:// y tienen el icono de un candado cerrado. Hay que comprobar que tengan una conexión segura por https y que cuentan con un certificado de seguridad para las transacciones dinerarias. En caso de recibir correos electrónicos o mensajes por Whatsapp, nunca responder abriendo el link que el correo contiene, ya que puede activarse un troyano capaz de copiar contraseñas bancarias, correos y otras claves. Vale la recomendación anterior. En el supuesto de que sean ventas a domicilio con el señuelo de “solidarias”, están prohibidas en virtud del artículo 30 del Estatuto Vasco de las Personas Consumidoras y Usuarias (Ley 4/23 de 27 de abril). No solo pican las personas mayores por ser más vulnerables, sino que el hecho de etiquetar como “compra solidaria” elimina recelos. Nunca hay que proporcionar datos bancarios para cargar la compra. Lo que parece claro es que las prisas, las emociones navideñas y las ganas de ayudar al prójimo no son opuestas al sentido común y a la toma de precauciones. Si aun y todo somos víctimas de la mala suerte, hagamos cuanto antes la denuncia.