«Trabajar para Alberto Contador te exige estar siempre concentrado»

Asus 41 años es el corredor más veterano del Tour y el que más grandes vueltas ha disputado, 32. El año que viene será su 20º en profesionales.

¿Cuál es la clave para seguir en el pelotón con 41 años?

Me pongo en el inicio de temporada el objetivo de responder a mis capitanes. Los últimos, años con Alberto. Me gusta dar todo en la carrera por él. Es muy importante que el físico todavía es bueno, pero en la carretera y en los duros entrenamientos la cabeza es lo más importante. Pienso que la experiencia que tengo, 19 años de profesional, me ayuda en un sacrificio que no me cuesta. Aprecio este deporte, me gusta. Y todavía estoy bien y espero seguir otro año. No tengo contrato todavía, pero Alberto quiere que siga con él. Tengo la posibilidad de cambiar de equipo, pero en principio mi objetivo es estar con Alberto y voy a discutir con Tinkov el nuevo contrato. Cuando eres joven piensas que son viejos los ciclistas de 35 y 36 años, pero recupero bien y pienso que entre los 38 y los 40 no hay diferencia. Tengo 41 y puedo hacer un buen trabajo un año más si no tengo problemas físicos.

¿Cómo es Contador como líder?

Alberto es un capitán muy exigente, pero en el sentido bueno. Le gusta estar siempre adelante para eliminar el peligro de caídas y del viento, y estoy con él. Llevamos cinco años juntos, conozco su exigencia y antes de que me lo diga ya sé lo que quiere. Lo importante es que siempre esté lo más cubierto posible del viento para que ahorre energías y en las etapas de montaña empezar el puerto en una buena posición, no comenzar atrás. No se puede comparar el trabajo que hacía para Petacchi, cuando me limitaba a trabajar en los últimos tres kilómetros y luego arrancaba el sprint. Para Boonen era similar, para Bettini era diferente, pero cuando se disputa la clasificación general es totalmente distinto. Debes estar concentrado desde el kilómetro 0 hasta él último, Trabajar para Alberto exige concentración siempre.

¿Su mayor satisfacción es que Contador salvó la primera semana sin perder nada de tiempo?

La primera semana es muy peligrosa con el viento, con las caídas y con el pavés, y Alberto siempre ha estado conmigo en las primeras posiciones para evitar las caídas. Alberto se ha quedado muy contento de la primera semana porque siempre estuvo fuera de peligro. Es muy difícil y para eso hay que tener máxima concentración.

¿Considera que ese trabajo está bien valorado?

Me gusta saber que tengo muchos aficionados, corredores y equipos que valoran el trabajo que hago. Saben que el gregario es muy importante para el líder. Si el capitán está fuerte y tiene un buen equipo es más fácil que pueda disputar la general.

¿Qué representa tener el récord de 32 grandes vueltas, doce Giros, once Tours y nueve Vueltas?

No lo sabía hasta que lo he visto un día en twitter que tengo 32. Parece algo extraordinario, pero para mí es normal. Con mi edad, es mejor correr grandes vueltas que carreras de un día en las que se va más rápido y no me convienen. Tengo mucha resistencia y con el paso de los años lo que hago es entrenar mucho más en altitud para aguantar mejor. Antes del Giro estuve dos semanas y antes del Tour otras dos y eso te permite ser más competitivo en grandes vueltas. Mi mujer está habituada, llevamos trece años y sabe que mi vida es siempre estar con la maleta preparada. Tengo una niña de cinco años y es más difícil, y por eso cuanto estoy en casa le dedico mucho tiempo a ella.

¿Con qué se queda de diecinueve años de profesional?

Lo más importante es conocer a mucha gente en todo el mundo, ciclistas, periodistas, mecánicos, directores, organizadores... Y me ha permitido visitar todo el mundo, lo que no habría podido con otro trabajo. Y me quedo con el respeto de todos. Yo respeto a todo el mundo y siento que todo el mundo me respeta.

«Los vascos siempre te dan la bebida fría»

Ha corrido 32 grandes vueltas y no ha participado en la Euskal Herriko Itzulia, pero tiene una gran consideración del aficionado vasco y le apena la desaparición de Euskaltel-Euskadi, un proyecto que tomaba como referencia para impulsar otro equipo similar en el Véneto.

¿32 grandes vueltas y por qué ninguna Itzulia?

Para mí es muy dura, pero no he necesitado correrla para conocer a los aficionados vascos. Son especiales, cuando vas al Tour o la Vuelta son los únicos que tienen la coca-cola fría, que es lo más importante. La bebida que te dan los vascos es la que está en mejores condiciones, te dan esponjas, hielo, te animan... Son especiales. Cuando veías camisetas naranjas y sus banderas sabías que te iban a dar lo que necesitabas.

Pero ha desaparecido la marea naranja con Euskaltel...

Es una pena, porque forma parte de la historia del ciclismo con su color naranja y la atmósfera especial que se creaba alrededor del equipo. Me gustaba mucho el Euskaltel-Euskadi y cuando pasé a profesionales soñaba con un equipo similar en el Véneto, de donde soy. Era un buen proyecto, pero por desgracia no salió adelante y ha cambiado el ciclismo. Ahora es un deporte mucho más globalizado, en todos los equipos hay ciclistas de todos los países y se ha perdido ese encanto que tenía Euskaltel.Joseba ITURRIA