Cada vez más creadores apuestan por la autoedición

Parece que le ha llegado su momento a la autoedición. Cada vez son más los libros y discos autoeditados en la Azoka de Durango. Por un lado, la propia feria monta el stand llamado Autoekoizleen Plaza donde un grupo de creadores seleccionados tiene la oportunidad de mostrar su trabajo. Bego Goitia y Gorka Egia Arregi son dos de ellos. La primera ha escrito ‘Kaka dantzaria’, un libro infantil sobre un trozo de caca que quiere ser bailarina, pero no lo tiene fácil. «Es un cuento que tiene un mensaje positivo sobre trabajar tu crecimiento personal, borrar las etiquetas y que cada pueda hacer eso que le gusta», explica su autora.

Egia Arregi en cambio ha escrito ‘Ekologista nazi baina…’, una guía práctica para obtener costumbres de consumo sostenibles. «Hay tanta oferta que la gente está como borracha de libros. Pero es una forma bonita de darte a conocer, y estar en Durango es siembre agradable, y solo por eso merece la pena», comenta mientras sostiene su libro.

En ese puesto hay 14 creadores que han traído sus propuestas de libros infantiles, canciones, sesiones de yoga, juegos de cartas, novelas… digamos que es como un espejo de la sociedad. En el rato que hemos estado con los creadores, convertidos en vendedores para la ocasión, una docena de personas se han acercado preguntando sobre las publicaciones. Cuando preguntan sobre sus propios libros los autores responden perfectamente –y cuando no, lo hacen lo mejor que pueden con una sonrisa–: «El producto es muy personal y la relación que tienes con la gente es muy personal», ha subrayado Goitia como una de las ventajas de la autoproducción.

La primera oportunidad

Pero también tiene desventajas. El dinero sale del bolsillo de cada uno y por tanto pueden llegar a perderlo si las ventas no son las suficientes. Además, no es tan fácil llegar al público y le toca a cada uno hacer publicidad. Por otro lado, en Autoekoizleen Plaza no hay apenas hueco para la música, de momento, según explica el responsable de Musika Zuzenean, Koldo Otamendi.

Según afirma, cada vez son más los músicos que apuestan por la autoedición por varias razones: porque quieren tener el control total de su producto, porque las ofertas de las discográficas ya no son tan jugosas como antes, o porque no tienen ninguna otra opción.

De las 90 novedades musicales que hay en la Azoka este año la mitad corresponden a Musika Zuzenean. «La única condición para estar en nuestro stand es que sean discos publicados a lo largo del año», cuenta, por lo que no es posible encontrar en Durango los de ediciones anteriores. Para ellos, más que el hecho de vender, lo importante es tener presencia en la feria porque es una ocasión única de llegar al público. A su vez, también es una buena ocasión para el público de descubrir grupos, ya que muchos de los discos que venden solo están a la venta en Durango y en los conciertos, no en las tiendas habituales.

«Yo siempre digo que en nuestro stand están los creadores pequeños de hoy, que serán los grandes músicos del futuro. Por ejemplo, hace tres o cuatro años el primer disco de Izaro estuvo en nuestro stand, y hoy es el día en que tiene su puesto de venta propio. Si nosotros no le hubiéramos dado esa oportunidad Izaro no habría podido traer su primer disco a Durango. Hacemos labores de puente para que quien quiere estar aquí, esté», comenta.