Osasuna trabaja para merecer más, pero el Betis termina con la imbatibilidad de El Sadar (1-2)

El Betis ha acabado con la inexpugnabilidad de El Sadar al aprovecharse primero del mal inicio de los anfitriones, que han reaccionado tras el descanso igualando la contienda, pero los visitantes han vuelto a ponerse por delante de manera definitiva a falta de un cuarto de hora para la conclusión.

Más que confiados, los locales han salido dormidos y lo han pagado caro. El Betis ha encontrado un filón por el costado zurdo rojillo y de ahí ha llegado el tempranero 0-1, encontrando las espaldas a la zaga navarra.

Un pase interior a Ruibal y la posterior asistencia a Vitor Roque le ha permitido al brasileño girar lo suficiente su tobillo derecho como para poner el esférico muy ajustado al palo superando la estirada de Herrera (m.7).

Ha sido el premio al mejor hacer visitante, que ha dominado con suficiencia en ese primer tramo de partido e incluso se ha podido poner con doble ventaja en un testarazo de Llorente –muy solo– que se ha marchado por encima del travesaño tras saque de esquina (m.12).

Un cuarto de hora le ha costado espabilar a Osasuna, hasta ese momento corriendo todo el rato detrás del balón. Ha tenido que ser Bryan, con un primer recorte y posterior caño, el que se ha sacado un trallazo centrado, pero con movimientos extraños de la pelota, que ha detenido bien colocado Rui Silva (m.15).

Aimar, junto al malagueño los dos grandes agitadores ofensivos rojillos del primer tiempo, le ha dado continuidad a la nueva dinámica, con un remate a la primera con la zurda que no se ha marchado muy lejos de la escuadra (m.17).

Con ventaja en el marcador, el Betis ha ido ralentizando el ritmo del envite todo lo que ha podido, aunque no sin dejar de mirar el marco osasunista. Y ha tenido hasta una doble ocasión para volver a adelantarse en el luminoso.

Catena ha sacado bajo palos un toque con la espuela de Vitor Roque –quizás el brasileño se ha adornado demasiado– y el rechazo no lo ha precisado Fornals cuando tenía toda la portería para él (m.24).

Apenas un minuto más tarde, Herrera ha tenido que protagonizar una gran intervención, sacando una manopla a tiro a placer de Bellerín, que no se ha explicado cómo el guardameta burgalés ha llegado a la pelota (m.25).

Tras ese intervalo, los anfitriones han recuperado la iniciativa, disponiendo de varios lances para equilibrar la contienda. De nuevo Aimar ha buscado la escuedra, pero en la trayectoria se ha interpuesto Bellerín (m.31).

Un gran desmarque de Budimir ha acabado en un mano a mano con Rui Silva, el croata ha intentado la picadita, pero el guante del cancerbero luso ha impedido el 1-1 (m.43) y, al filo del descanso, Rubén García también se ha encontrado con el obstáculo del cuerpo de un defensa cuando el cuero ya iba camino de las mallas (m.45).

La estrategia, decisiva

La estrategia ha sido decisiva en el segundo tiempo. De dos balones parados han llegado el 1-1 y el 1-2 definitivo. Cierto es que Osasuna ha salido con otro talante, mucho más dominador, ocupando mejor los espacios y arrinconando a su rival en propio campo.

Aimar ha vuelto a inquietar con un disparo que no ha podido concretar por falta de su marcador que no ha pitado Muñiz Ruiz (m.48), quien tampoco ha apreciado penalti a Budimir en otro remate del croata en posición inmejorable, siendo tocado por detrás (m.56).

Pese a ello, la escuadra navarra no ha cejado en su empeño y ha logrado la igualada en una falta al borde del área, pero bastante centrada, que Rubén García ha puesto en el segundo palo para que Catena prolongase con la cabeza al primero, donde se ha ubicado Torró para empujar a las redes (m.59).

El empate ha insuflado oxígeno añadido a los rojillos, que han seguido dominando y generando, como otra ocasión del omnipresente Aimar –las jugadas ofensivas osasunistas mejoran notablemente cuando la toca el de Arazuri–, que no ha encontrado línea de pase y ha acabado rematando un tanto escorado y cerrándole bien el camino Rui Silva (m.65).

Sin embargo, los cambios béticos en ataque han despertado al bloque sevillano. Chimy Ávila, muy pitado desde la grada, ha peleado como acostumbra con los centrales y Abde, aplaudido por contra, ha llevado peligro por banda.

Pero ha sido una absurda falta cometida por Boyomo, que se ha permitido el lujo de regatear a Chimy cuando ya le había quitado la pelota y ha tenido que acabar agarrando al argentino en un costado del área, la que ha decantado el envite.

En una jugada de estrategia, el saque ha ido al punto de penalti donde Bartra, libre de marca, ha cabeceado potente y abajo, respondiendo bien Herrera, pero despejando como ha podido y aprovechándose un listo Chimy para adelantarse a toda la defensa y alojar el cuero en las mallas (m.73).

Lo ha celebrado con ganas el rosarino y, si ya el graderío estaba caliente con su salida, su festejo se ha transformado en todo un coro masivo de improperios hacia su figura, pero su tanto ha resultado decisivo.

Y es que, a partir de ahí, ya ha sido un quiero y no puedo. Osasuna ha puesto cerco a la meta de Rui Silva, pero sin mayor orden ni concierto, con mucho corazón, pero poca cabeza, incluso cuando en el descuento se ha quedado el Betis con uno menos por expulsión –la ha detectado el VAR– de Natan tras feo plantillazo a Raúl, que ha generado más de una trifulca entre futbolistas de uno y otro equipo.

De ese final accidentado también ha salido malparado Torró, quien ha sufrido una conmoción cerebral tras chocar cabeza con cabeza con un adversario, lo que ha obligado a que fuera trasladado a un centro hospitalario.

Una situación que solo ha favorecido a los intereses verdiblancos, pertrechándose en propia área y achicando el poco peligro que ha sabido producir un conjunto navarro que encaja su primera derrota en propio feudo y no puede igualar el comienzo liguero de Javier Aguirre en la 2005-06. Una pena.

Aprobación de manera holgada

La actual junta directiva de Osasuna ha sacado adelante con holgadas mayorías todas las propuestas llevadas a las sendas asambleas de socios compromisarios que se han celebrado por la mañana.

Para empezar, se ha aprobado la recompra de una parcela de Tajonar con una superficie de 28.244,04 metros cuadrados. Supondrá un coste de 4 millones –a pagar en otros tantos plazos– para las arcas rojillas y en ella se pretende construir la futura ciudad deportiva.

También se le han dado el visto bueno –187 votos a favor, 14 en contra, 5 en blanco y 9 nulos– a las cuentas de la campaña pasada, con un superávit de 2,8 millones gracias a las ventas de Chimy Ávila y Adama.

Lo mismo ha ocurrido con el presupuesto –185 a favor, 17 en contra, 1 en blanco y 8 nulos– para la presente, que será de 80,3 millones, récord en la historia de la entidad rojilla.

Similar resultado –185 síes, 14 noes y 7 nulos– se ha producido para la solicitud a la Asamblea de una autorización excepcional para que la Junta Electoral pueda llevar a cabo cuantas acciones sean necesarias para adelantar el proceso electoral que debe conformar la nueva Asamblea.

Por último, el presidente de Osasuna, Luis Sabalza, ha reiterado su intención de ampliar el aforo de El Sadar eliminando algunos pasillos, para lo que se requiere una modificación legislativa.