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Los accionistas del Eibar evalúan este jueves los números del club

El Consejo de Administración somete las cuentas al escrutinio de la Junta General de Accionistas. Prevé un aumento de ingresos y una reducción de gastos pero sigue en números rojos y ha perdido un 30% de su patrimonio. Además, ha tenido que devolver la subvención del CSD al fútbol femenino.

Los consejeros azulgranas detallarán la situación de la entidad ante los accionistas. (SD Eibar)

El Coliseo acogerá este jueves (19.00) la Junta General de Accionistas del Eibar. Por tercer año consecutivo, se celebrará con el equipo en Segunda y eso volverá a reflejarse en unas cuentas muy diferentes de las que acostumbraba la entidad. Aunque se han ido limando gastos, los ingresos han caído en picado, así que el Eibar ha perdido un 30% de su patrimonio desde que descendió, más de nueve millones solo en el último ejercicio, cuyas cuentas son las que se someten a votación. El tijeretazo es mucho mayor en el presupuesto de la presente campaña, en el que además crecen los ingresos, pero el club azulgrana repetirá números rojos.

La temporada 23/24 se cerró con mejores resultados de los presupuestados pero, aún así, el golpe a las arcas volvió a ser importante. Se ingresaron casi 14 millones y se gastaron algo más de 22 (un 20% más y un 4% menos de lo previsto, respectivamente), lo que arroja un resultado negativo de 8,36 millones de euros.

La pérdida es algo inferior a la de los dos ejercicios anteriores pero el total de las tres temporadas en Segunda le han supuesto al club una pérdida patrimonial de 21,4 millones, casi una tercera parte del patrimonio que tenía el Eibar en 2021, cuando acabó su andadura en la elite. Responde al plan diseñado por el propio Consejo de Administración, que diseñó un plan a tres años para intentar regresar a Primera, en el que el bajón de ingresos, principalmente por derechos de televisión, se compensaba echando mano a los ahorros. Lamentablemente, todo el dinero que se había apartado para ese fin, además de los veinte millones en concepto de ayuda al descenso, ha volado sin obtener a cambio los resultados deportivos deseados.

En 2024, además, han crecido los pasivos financieros por el acuerdo con los fondos CVC, de donde ya han llegado a las arcas del club casi 40 millones de euros, destinadas en su mayoría a infraestructuras.

El dinero de los traspasos

Aunque seguirá en números rojos, el Eibar recorta considerablemente gastos y pérdidas en el presupuesto diseñado para la presente temporada. Y, además, aumentan los ingresos, principalmente por los traspasos de Luca Zidane, Stoichkov, Juan Berrocal y Juan Carlos Arana, que le reportan 3,8 millones. Además, serán otros 2 correspondientes a ingresos financieros –casi el doble se consiguieron el curso pasado, lo que alivió considerablemente las cuentas–, por lo que, aunque la cifra de negocio crece de forma casi interceptible, un 2,38%, los ingresos totales alcanzan los 16,3 millones, lo que supone un aumento del 17% respecto a la temporada anterior.

Los gastos descienden prácticamente en la misma proporción: si en el último ejercicio superaron los 22,3 millones, en el actual no deberían pasar de los 18,7. El mordisco a los gastos de personal deportivo ha sido de más de tres millones, para quedarse en 10,5.

Todo ello arroja un resultado negativo de 2,4 millones de euros; casi un 80% menos que la temporada pasada pero los números siguen escribiéndose con tinta roja en una entidad que no puede tardar mucho más en recuperar el equilibrio económico.

El equipo femenino

Una de las novedades de este 2024 pasa por la integración en la sociedad de la actividad deportiva del primer equipo femenino, que por segunda temporada compite en Liga F, y que hasta ahora formaba parte de Ipurua Kirol Fundazioa. Eso quiere decir que el club asume el gasto pero también los ingresos derivados de la venta de los derechos televisivos y comerciales de la competición femenina.

Con lo que no podrá contar es con la subvención del Consejo Superior de Deportes, que ha tenido que devolver tras recibirla durante el ejercicio 22/23 y que roza los 800.000 euros. El ente gubernamental repartió 16 millones de euros para contribuir a la profesionalización del fútbol femenino, destinado en su mayoría a la mejora y construcción de infraestructuras. Con ese objetivo solicitó su parte el Eibar pero el considerable retraso acumulado en las obras de la Ciudad Deportivo de Areitio ha impedido que la obra objeto de la subvención, específica para el primer equipo femenino, se realizara en los plazos requeridos.

La Ciudad Deportiva y la actualidad deportiva

Precisamente las instalaciones de Areitio ocuparán buena parte de la Junta. No es descartable, incluso, que Amaia Gorostiza aproveche la cita para anunciar la fecha en la que podrá empezar a utilizarse la Ciudad Deportiva, que acumula un retraso de más de un año. Aprobada su construcción en 2018, la previsión del Consejo era que, aun sin completarse la obra, el complejo pudiera empezar a utilizarse 18 meses después de que entrara la primera máquina. Lo cierto es que han transcurrido 29 desde ese momento y los equipos del Eibar siguen repartiéndose por Ipurua, Atxabalpe y Unbe para entrenar.

A los dirigentes azulgranas les interesa especialmente dar buenas noticias al respecto porque la irregular andadura del equipo se dejará notar en el ambiente de la Junta. Dicho sea bajo el prisma de la entidad azulgrana, en la que, aunque la tensión sea más palpable en los últimos años, estas citas suelen acabar en paz, más allá de algún debate en el turno de ruegos y preguntas, y con aprobación amplísima de todas las propuestas del Consejo.

Accionistas que no acudan o hayan delegado su voto, interesados y curiosos pueden seguir la reunión por streaming a través de la página web del club.