Van Aert gana su tercer Mundial consecutivo sin la oposición de Van der Poel

El holandés fue el gran derrotado en una prueba disputada en su país, solo aguantó una vuelta al flamenco y sufrió para mantener la medalla de bronce.

Wout van Aert (Harentals, 1994) logró su tercera victoria en un Mundial de ciclo cross al derrotar ayer en Valkenburg con una autoridad insultante al favorito Mathieu van der Poel, al que le volvió a superar la presión de correr ante su público tras una temporada en la que había sido el gran dominador. Estuvo incluso a punto de quedarse fuera del podio, pero terminó tercero por detrás de Van Aert y Vanthourenhout.

La carrera resultó sorprendente no tanto por la victoria de Van Aert, que por algo ha ganado tres Mundiales consecutivos con apenas 23 años, como por la nula oposición que encontró en Van der Poel, que solo estuvo a la altura de lo esperado en la primera vuelta, que culminó en cabeza.

En la segunda marchaba a rueda de Van Aert cuando se enganchó con la cinta que delimitaba el circuito y perdió unos metros sobre su rival. El flamenco aceleró y el holandés no reaccionó y se abrió una diferencia que cada vez era mayor. Van der Poel se vino abajo y primero fue alcanzado por Vanthourenhout, que luego lo descolgó, y en la última vuelta vio incluso peligrar su presencia en el podio al ser atrapado por Toon Aerts. Entonces el holandés sí reaccionó y consiguió salvar la medalla de bronce, lo que no evita ampliar la sensación de que no puede con la presión de los Mundiales.

Parecía llamado a romper todas las marcas cuando ganó su primer maillot arco iris con 20 años recién cumplidos en 2015 y desde entonces se ha visto superado en las tres ediciones siguientes por Van Aert, que se adaptó mejor al durísimo circuito de ayer en Valkenburg.

Los dos vascos participantes, Javier Ruiz de Larrinaga y Aitor Hernández, sufrieron en un terreno embarrado y muy técnico al que no están acostumbrados y acabaron en los puestos 35º y 45º, respectivamente.

«Un Mundial durísimo»

Aitor Hernández señalaba tras la carrera que «ha sido un Mundial durísimo. Se ha visto que Van Aert ha estado fuertísimo, no ha dejado opciones a sus rivales y hemos conseguido ir hacia adelante lo máximo posible y no hemos podido lograr un puesto mejor».

Ruiz de Larrinaga, por su parte, comentaba que «he conseguido hacer una salida decente, pero era un recorrido durísimo y Van Aert no ha dado tregua a nadie. En la segunda parte he sufrido. Era un circuito de no hacer errores, psicológicamente muy duro. Me quedo con que ha sido uno de los Mundiales más duros que he corrido».