Comienza el juicio sobre las aportaciones de Fagor y Edesa

Las asociaciones Ordaindu y Eskuratu se enfrentan en un proceso judicial a la Corporación Mondragon para intentar recuperar sus aportaciones –la mayor parte hechas como inversiones voluntarias– en Fagor Electrodomésticos y Edesa. Estos colectivos representan a uno de cada cuatro socios que integraban la cooperativa que quebró en 2014.

El juicio sobre las aportaciones voluntarias de los socios de Fagor Electrodomésticos (FED) y Edesa comenzará el lunes en el Palacio de Justicia de Bergara y se prolongará hasta el jueves. Las asociaciones demandantes, Ordaindu y Eskuratu, reclaman a la Corporación Mondragón el dinero invertido en la cooperativa antes de la quiebra. MCC, por su parte, sostiene que esas inversiones fueron realizadas «individual y voluntariamente», y recuerda que, por ellas, todos los socios «percibieron importantes intereses durante años». La demanda fue impulsada por 885 del total de 3.600 socios que había cuando llegó la quiebra.

Los demandantes reclaman el dinero que invirtieron en su propia cooperativa en forma de “aportaciones voluntarias” –una figura que solo se daba en el Grupo Fagor– y de “préstamos mercantiles”, así como “reintegros pendiente” tras la baja en la empresa. Acusan de «engaño» a la Corporación y afirman que los directivos de ésta conocían la situación de FED/Edesa y, sin embargo, no informaron a los socios, que no pudieron retirar sus aportaciones a tiempo. En la vista previa del juicio, en enero del año pasado, indicaron que realizaron esas aportaciones para financiar la empresa porque apostaban por la autofinanciación, y «por amor y confianza».

«Demanda contra los socios»

Mondragon responde a esta acusación señalando que «los demandantes tenían pleno conocimiento de las decisiones y riesgos empresariales de sus cooperativas», y rechaza cualquier responsabilidad en la crisis de esas empresas. A su vez, subraya que la Corporación y sus cooperativas son el principal acreedor y, por lo tanto, «el principal perjudicado» de la quiebra. Por ello, entiende que «la demanda va en contra del resto de cooperativas y sus socios».

MCC incidió en que «no es un holding empresarial en el que la matriz ejerce un control efectivo sobre el conjunto de las cooperativas, sino una asociación de distintas cooperativas autónomas y soberanas». Explica que la responsabilidad es exclusiva de FED/Edesa y que las decisiones sobre su futuro se adoptaron en sus órganos, por lo que «carece de fundamento solicitar a Mondragon –a sus cooperativas y socios– la devolución de las inversiones».

Por el contrario, los demandantes opinan que la Corporación dispone de medios propios suficientes para solucionar el problema y que, aunque otra posibilidad es que «paguen las cooperativas», son partidarios de que MCC se haga cargo.

Mondragon sí tiene el compromiso de reubicar a los trabajadores de las distintas cooperativas y, en este caso, tuvo un «papel activo» que ha permitido que el 95% de los 1.895 trabajadores y trabajadoras que seguían en activo en FED/Edesa encontraran una solución.

Está previsto que en la vista testifiquen altos cargos de MCC y de Fagor Electrodomésticos en el momento de la crisis. Los demandantes pidieron la presencia de Iñigo Ucín, actual presidente de la Corporación, pero en su lugar acudirá la secretaria general, Arantxa Laskurain.