El premio pirotécnico se va a Valencia, Donostiako Piratak aún tienen mecha

El programa oficial se ha agotado en Donostia la pasada noche con Jarabe de Palo en Sagues y el espectáculo piromusical final, horas después de conocerse que el premio de este año se vuelve a ir a un apellido clásico, el de la valenciana Hermanos Caballer. Pero donde queda mecha festiva es en La Flamenka, porque el último cartucho pirata volverá a ser Irrikitaldia a partir de las 17.00 en el Boulevard. Y la parodia de la ciudad suele ser eso, de traca.

Ocho días y ocho noches después, el programa oficial de Aste Nagusia dio ayer sus últimos coletazos, con las actividades ya clásicas: el concurso de marmitako, la despedida a la comparsa de gigantes y cabezudos (este año en la Plaza de la Constitución y no en Zuloaga), el festival piromusical y el concierto final en Sagues, en esta ocasión a cargo de Jarabe de Palo.

Pero los ojos de todos los que han estado mirando al cielo cada noche se fijaban a mediodía en la decisión del jurado del Concurso Internacional de Fuegos Artificiales. Y no hubo gran sorpresa. Por segundo año consecutivo el galardón se fue a Valencia a engrosar las vitrinas de Hermanos Caballer, una empresa nueva (surgida en 2011) pero que hereda un apellido de larga historia.

Caballer había lanzado su colección justo la noche anterior, el viernes, en una edición que ha ido de menos a más. Las primeras jornadas no dejaron buen regusto, pero desde el martes la cosa repuntó con la italiana Parente (que ha sido tercera clasificada) y el miércoles con la alemana First Class Pyro-Events (segunda en la deliberación del jurado, que se afirma que fue muy competida, y ganadora también del galardón que premia el mejor inicio).

La Concha de Oro de esta 55. edición se la llevan pues en la maleta los hermanos José y Jorge Caballer.

A las 17.00 en el Bule

La fiesta, por contra, aún tiene recorrido en la zona pirata, y eso que el viernes fue fuerte con un Gazte Eguna muy completo (a destacar el animado concurso de play-back y la tamborrada posterior) y qué decir de ayer, donde tocó desde subir a Urgull en el cross matinal hasta doble concierto en La Flamenka.

Pero donde los y las piratas echan ya el resto es en Irrikitaldia, el auténtico Debate sobre el Estado de Donostia en versión paródica y surrealista. Los disfraces de belle epoque y las caricaturas de los mandamases donostiarras actuales están listas para echar unas buenas risas, después de la comida popular en el puerto. El desfile partirá a las 17.00 del kiosko del Boulevard y el esperpento seguirá luego en las escalinatas de Santa María.