18 AOûT 2020 HALLAN LOS RESTOS ÓSEOS DE MIGEL JOAKIN ELEIZEGI El Gigante de Altzo seguirá en su pueblo, «donde quiso ser enterrado» La Sociedad de Ciencias Aranzadi, con un equipo de 15 personas, ha hallado los restos óseos de Migel Joakin Eleizegi, conocido como el Gigante de Altzo, en el cementerio de Altzo Azpi. Se desmonta así la teoría de que sus huesos fueron robados o vendidos. Aranzadi considera que este descubrimiento «agranda la leyenda» del Gigante de Altzo. Ane URKIRI ANSOLA ALTZO «¿Cuándo se convierte una persona real en un personaje mitológico?». Eso mismo se preguntaron los directores Jon Garaño y Aitor Arregi a la hora de construir la historia del film “Handia”, basado en la historia real de Migel Joakin Eleizegi. Están asimilando la noticia de que los restos óseos del Gigante de Altzo han aparecido en el mismo cementerio de Altzo Azpi, hecho que desmonta por completo algunos rumores e hipótesis que circulaban en torno a Eleizegi, como que sus huesos fueron robados o vendidos una vez que fue enterrado. «Ahora mismo piensas más en la persona. Te viene a la mente la película, pero ahora mismo es más importante saber que Migel Joakin Eleizegi existió y que siempre ha estado aquí», explicó a GARA Jon Garaño. Aitor Arregi, por su parte, afirmó tener «sentimientos especiales» y siente que toda esta investigación «encaja perfectamente» con lo que quisieron contar con ‘Handia’: «Se retroalimentan». Los directores guipuzcoanos fueron dos de los espectadores de lujo que presenciaron la rueda de prensa en la que la Sociedad de Ciencias Aranzadi mostró el esqueleto casi al completo del Gigante de Altzo. El hallazgo del primer resto óseo se registró el pasado viernes, a los cuatro días de haber empezado la exhumación. Paco Etxeberria, antropólogo, investigador y el que ha liderado este proyecto, admitió que perdieron algo de tiempo al empezar a buscar en la misma tumba de los familiares de Eleizegi. Allí no había ni rastro del Gigante de Altzo y pasaron al plan B: a empezar a buscar en el osario, donde se acumulan los restos óseos de cualquiera a medida que pasa el tiempo. Teniendo en cuenta que Migel Joakin Eleizegi falleció en 1861 a los 47 años de edad, después de casi dos siglos, era un posibilidad real encontrar sus restos en el osario y así ha sido. «La sorpresa» para los expertos ha sido encontrar en tan buen estado, sin síntomas de erosión o desgaste provocados por las raíces o por el agua. Seguirá en Altzo Azpi Lourdes Errasti, arqueóloga de Arantzadi, afirmó que con este hallazgo han podido comprobar que padecía de artrosis y una osteoporosis en estado muy avanzado, porque los huesos «no pesan más que el de otro ser humano». Podrán comprobar si murió por tuberculosis. Esta exhumación que ha desmontado la hipótesis de que los huesos fueron robados o vendidos comenzó por la iniciativa de Karlos Almorza, miembro de Aranzadi. Explicó que a la historia del Gigante de Altzo le rodeaban dos rumores y que tenían a mano descubrir uno de ellos: «¿Los restos de Migel Joakin Eleizegi están en el cementerio o no?». Comenzaron a trabajar el 12 de agosto, con el visto bueno del Ayuntamiento y de los familiares. Migel Joakin Eleizegi Ateaga fue una figura escénica por su gran estatura. Padeció la enfermedad de gigantismo y llegó a medir entre 2,20 y 2,40 metros de altura y 2,42 metros de anchura. Por el tamaño de la mandíbula, del húmero o del fémur mostrados ayer salta a la vista que fue alguien especial. Aranzadi cree que esto «agranda la leyenda» y aseguró que seguirá en el cementerio. «Se demuestra que quiso ser enterrado en casa», precisó Etxeberria. EQUIPO La exhumación ha sido llevada a cabo por un equipo de 15 personas que han trabajado de forma voluntaria. Entre ellos se encuentran el médico forense ginebrino Morris V. Tidball, el neurobiólogo Rafael Yuste y Xabi Uribe Etxeberria, director de Sherpa, empresa dedicada a la inteligencia artificial.