Macron suma a Thierry Beaudet a la ecuación y crecen las especulaciones

Señuelo, globo sonda o pista creíble son las tres interrogantes que se abren después de que Thierry Beaudet se haya sumado a posibles candidatos a primer ministro, una hipótesis que no levanta entusiasmo en las filas del PS. El actual presidente del Consejo Económico, Social y Medioambiental fue la nueva carta de Macron en una intensa jornada de consultas sin desenlace.

Emmanuel Macron cerró ayer un intenso día de consultas políticas destinadas a intentar buscar un consenso mínimo en torno a un primer ministro que pueda sobrevivir a una moción de censura en la Asamblea Nacional. A Bernard Cazeneuve y Xavier Bertrand se sumó en la terna un desconocido del público en general, Thierry Beaudet, presidente del Consejo Económico, Social y Medioambiental (CESE).

El presidente francés terminó con un encuentro con el primer ministro en funciones, Gabriel Attal, una ajetreada jornada en la que también se reunió en el Elíseo con sus dos predecesores en la jefatura del Estado, el socialista François Hollande y el conservador Nicolas Sarkozy.

Macron abrió la jornada con Cazeneuve, primer ministro y ministro con Hollande aunque dejó el Partido Socialista en 2022, y que es el hombre que parecía encabezar hasta ayer la lista del presidente para encabezar el Ejecutivo y que podría provocar un cisma en el Nuevo Frente Popular.

Además, Macron se reunió con el conservador Xavier Bertrand, y con el líder centrista François Bayrou, uno de los principales aliados políticos del presidente. Con Cazeneuve como favorito en las apuestas si Macron apuesta por probar la vía del centro-izquierda, Bertrand sería otra opción si el presidente opta por una orientación de centro-derecha.

Todas las reuniones tuvieron lugar entre el más estricto silencio de todas las partes, ya que ni el Elíseo permitió el acceso de la prensa a su patio ni los interlocutores del presidente realizaron declaraciones a la salida.

Por ello, no hay ningún indicio de cuándo podría anunciar el presidente su decisión sobre el primer ministro, mientras el Estado francés se acerca a su récord con un Gobierno en funciones durante la V República.

Entretanto, varios medios franceses señalaron que una nueva posibilidad «muy seria» para el puesto de primer ministro sería Thierry Beaudet, actual presidente del Consejo Económico, Social y Medioambiental (CESE). Macron y Beaudet ya intercambiaron opiniones en conversaciones institucionales anteriores y algunos fuentes cercanas al Elíseo aseguran que «es una respuesta sólida y nueva a esta necesidad de diálogo en la sociedad, en particular con las fuerzas sociales».

¿LA SORPRESA?

Beaudet es un hombre centrado en la economía social y que podría cumplir el rol de un jefe de Gobierno técnico hasta que puedan repetirse las elecciones legislativas en julio del año próximo. «Podría ser una buena sorpresa», apuntan interlocutores sociales.

Sin embargo, no está claro si la filtración de su nombre significa una intención real del presidente de nombrarle o es simplemente un globo sonda para probar la hipotética aceptación de su figura.

Hasta que surgió el nombre de Beaudet, el favorito parecía ser Cazeneuve, como una alternativa de Macron a favor de una izquierda muy moderada frente a Lucie Castets, la primera ministra que propone desde hace mes y medio, pero sin éxito, la coalición de izquierda del Nuevo Frente Popular (NFP).

Cazeneuve, que fue ministro y luego primer ministro durante el mandato de Hollande (2012-2017) -y que más tarde dejó el PS, sobre todo por sus divergencias con la nueva dirección por su acercamiento con La Francia Insumisa (LFI) de Jean-Luc Mélenchon- se percibe como una tentativa del jefe del Estado para hacer saltar por los aires la alianza izquierdista.

Sea cual sea el elegido por Emanuel Macron, tendrá que afrontar una Asamblea Nacional muy dividida y sin mayorías claras, un auténtico rompecabezas, con amenazas de mociones de censura cruzadas entre los tres grandes bloques (ultraderecha, macronismo y alianza de izquierdas).

Las consultas de Macron con partidos y grupos parlamentarios comenzaron el 23 de agosto pero, salvo rechazar la opción de Castets que proponía el NFP, el presidente francés no ha tomado ninguna decisión, entre las críticas de parte de la oposición que lo acusan de excederse en sus funciones por tratar de tejer alianzas parlamentarias, una labor que, en teoría, corresponde al jefe del Gobierno.

El primer secretario del Partido Socialista, Olivier Faure, advirtió de que el NFP apoyará una moción de censura contra «cualquier continuidad con el macronismo» y apuntó a que pensarían en respaldar a Bernard Cazeneuve si logra derogar la polémica reforma de las pensiones.

El currículum de Thierry Beaudet más bien de izquierdas «no es cuestionable», pero Faure dijo que «no sé que opciones políticas defiende». Al ser preguntado por si censurarían un Gobierno del actual presidente de CESE, respondió «por supuesto».

«Nos dan nombres y queremos un proyecto», añadió, recordando que el Nuevo Frente Popular, del que forman parte, tenía «una candidata, Lucie Castets, «un proyecto» y una mayoría relativa.

«No tengo motivos particulares para juzgar a priori a Thierry Beaudet», insistió, pero «no conozco su proyecto, no sé quiénes son sus partidarios, no cuenta con el apoyo de una coalición», recordó. «No digo que debamos rechazar su perfil», pero «cualquiera que sea el nombre que me sugieran, solo comentaré los proyectos», zanjó Olivier Faure.

Lucie Castets al ser interpelada al respecto, manifestó que «el Nuevo Frente Popular apoya un cambio de política y, por lo tanto, apoyará a un candidato, a una persona que sea capaz de cambiar la política (...) en este país».