05 OCT. 2025 Marcha sin precedentes en Iruñea en favor de Palestina Tras el asalto y captura de la Flotilla el jueves pasado, Iruñea acogió la manifestación más multitudinaria de los últimos años. Convocada por Palestinarekin Elkartasuna, pero transversal en el fondo (acudió hasta María Chivite), la protesta defendió la ruptura total de relaciones con Israel tanto en lo económico como en lo gubernamental y académico. Los manifestantes avanzando por la Avenida del Ejército, ocupándola de lado a lado. (Iñigo URIZ | FOKU) Aritz INTXUSTA {{^data.noClicksRemaining}} Pour lire cet article inscrivez-vous gratuitement ou abonnez-vous Déjà enregistré? Se connecter INSCRIVEZ-VOUS POUR LIRE {{/data.noClicksRemaining}} {{#data.noClicksRemaining}} Vous n'avez plus de clics Souscrire {{/data.noClicksRemaining}} Iruñea no había vivido una movilización tan masiva como la de ayer al mediodía en favor de la resistencia palestina desde las grandes manifestaciones por el «caso Altsasu». Ya en Antoniutti, el punto de encuentro, el espacio ocupado por los solidarios era sustancialmente mayor que en citas anteriores por distintas causas, obligando incluso a bloquear el último tramo de Pío XII, que va desde el Edificio Singular hasta el inicio de Navas de Tolosa. Situación que no se dio, por ejemplo, en las últimas manifestaciones vespertinas del 8-M, que también arrancaron desde ahí. La cabecera empezó a caminar por la Avenida del Ejército media hora después de lo previsto. Pero no les bastó con uno de los sentidos de la calzada y la acera correspondiente, así que a la altura del portal 32, cruzaron la mediana y la marcha pasó a ocupar los dos sentidos. La misma doble ocupación se dio a lo largo de toda la Avenida Baja Navarra, cuyas rotondas principales, Príncipe de Viana y Merindades, fueron rebasadas por los manifestantes en ambos sentidos. La multitud marchó por las dos aceras y los seis carriles a lo largo de cientos de metros. Debido a la magnitud de la manifestación, que los organizadores cifraron en 50.000 personas, NAIZ no puede ofrecer una estimación fiable de la asistencia, más allá de constatar que en las últimas décadas no se ha visto una protesta tan masiva por la causa palestina. El perfil de los asistentes fue muy plural, prácticamente transversal: jóvenes, padres con sus hijos, jubilados, personas de procedencia árabe, personas de aspecto más politizado y otras que parecían estarlo menos. También se pudo ver, en un espacio discreto, a la lehendakari María Chivite. CÁNTICOS Y MANIFIESTO Se escucharon los lemas «Boikot Israel, Palestina askatu» e «Israel suntsitu!» junto con otros en castellano, como «Desde el río hasta el mar, Palestina vencerá» y «La tierra robada será recuperada». A lo largo de la protesta se registraron acciones no violentas, como arrojar pintura contra la sede de Zara, pegar pegatinas en comercios como Mango o Carrefour, lanzar esporádicamente y encender bengalas. En el acto central, además de una intervención musical con la canción dedicada a Wafa Idris, se prendió fuego a una bandera del Estado sionista. «Es hora de que, en el camino de la desaparición del Estado terrorista -señalaron en la lectura del comunicado-, se rompa toda relación con Israel, todo acuerdo de compraventa, todo evento deportivo, toda relación diplomática. Ya es hora de que CAF rompa sus contratos, de que el Maccabi, el Hapoel, el Israel Premier Tech y otros equipos sionistas sean eliminados de las competiciones. Y ya es hora de que el Gobierno de Navarra, el Gobierno Vasco, y las instituciones de las tres provincias de Ipar Euskal Herria, así como las universidades vascas corten toda relación comercial, académica y diplomática». Palestinarekin Elkartasuna mostró su «total solidaridad» con los activistas de la Flotilla capturados por Israel. También criticó la criminalización de la resistencia palestina, pues aseguró que, sin ella, «un siglo después de la creación del proyecto sionista, el pueblo palestino habría desaparecido hace tiempo». Durante la protesta se registraron acciones no violentas, como arrojar pintura contra la sede de Zara y pegar pegatinas en comercios como Mango o Carrefour