17 OCT. 2025 Lecornu supera las primeras mociones de censura Sébastien Lecornu superó ayer por un estrecho margen las dos mociones de censura presentadas por La Francia Insumisa y la extrema derecha de Marine Le Pen gracias al desmarque del PS. Sébastien Lecornu superó dos «match ball», aunque por escaso margen. (Aurelien MORISSARD | EUROPA PRESS) GARA PARÍS {{^data.noClicksRemaining}} Pour lire cet article inscrivez-vous gratuitement ou abonnez-vous Déjà enregistré? Se connecter INSCRIVEZ-VOUS POUR LIRE {{/data.noClicksRemaining}} {{#data.noClicksRemaining}} Vous n'avez plus de clics Souscrire {{/data.noClicksRemaining}} Las dos mociones de censura contra el segundo Gobierno del macronista Sébastien Lecornu, que habían presentado la izquierda de la Francia Insumisa (LFI) y la extrema derecha de Marine Le Pen, no sumaron ayer los votos necesarios en la Asamblea Nacional para hacerle caer del sillón presidencial. La moción de LFI, respaldada también por la extrema derecha de Marine Le Pen, logró 271 apoyos, por debajo de los 289 que necesitaba para salir adelante, mientras que la depositada por la Agrupación Nacional de Le Pen cosechó 144 votos. LFI, los comunistas, los Verdes y la extrema derecha habían anunciado su apoyo a la moción de la primera formación, mientras que Los Republicanos y, sobre todo, el Partido Socialista optaron por la vía contraria, con algunas excepciones. De esta forma, la Asamblea Nacional rechazó por un estrecho margen de solo dieciocho votos la moción de censura presentada por LFI contra el Gobierno, gracias a la decisión del PS de dar una oportunidad a Lecornu a cambio de su promesa de suspender la reforma de las pensiones hasta enero de 2028, después de las elecciones presidenciales previstas en la primavera de 2027. MOCIÓN CONTRA MACRON Tras el revés a su moción de censura, la jefa de filas de LFI en la Asamblea Nacional, Mathilde Panot, anunció que presentarán una nueva moción de destitución, en este caso contra el presidente francés, Emmanuel Macron. Panot llamó también a los activistas y votantes del PS a «romper filas» con el liderazgo actual de Olivier Faure, quien arremetió, por su parte, contra lo que denominó «hipocresía» de los que habían votado a favor de la moción de censura de LFI. «Hay hipocresía en esta Asamblea», ya que los que apoyaron la moción de censura «saben que, si se aprobara, el Gobierno implementaría su presupuesto mediante una ley especial, y que todo aquello contra lo que dicen luchar se impondría entonces al pueblo francés, sin dar oportunidad a que se modificasen las cuentas» durante el periodo de la negociación parlamentaria. Eel presidente de la ultraderechista Agrupación Nacional, Jordan Bardella, lamentó, por su parte, que la «mayoría negociadora» consiguiera «salvar sus posiciones en detrimento del interés nacional» y vaticinó, en un mensaje en redes sociales, que son los franceses quienes «se preparan para sufrir la masacre social y fiscal de un presupuesto punitivo». «Todos los que se han negado a la censura serán responsables del sufrimiento futuro del país», aseguró Bardella, cuyo partido perseguía, al igual que LFI, un adelanto electoral como principal objetivo. En la misma línea se expresó el líder del grupo Unión de Derechas por la República, Éric Ciotti, quien fue de la mano de la Agrupación Nacional en lo referente al apoyo de la moción de censura a Lecornu. La frágil victoria del Gobierno anuncia tensos debates durante el trámite de los presupuestos, máxime cuando Lecornu renunció a aprobarlos sin el voto del Parlamento, como le permite la ley y el oficialismo hizo desde 2022. MARGEN EXIGUOTan solo 18 votos evitaron que la moción de censura planteada por LFI saliera adelante, al no ser secundada por la mayoría del PS, que se desmarcó tras la promesa de Lecornu de aplazar la reforma de las pensiones. HIPOCRESÍAEl presidente del Partido Socialista, Olivier Faure, tildó de «hipócritas» a quienes apoyaron la moción, que provocaría la aplicación de una ley especial para sacar adelante los presupuestos.