28 OCT. 2025 EDITORIALA El experimento ultraliberal de Milei allana su camino {{^data.noClicksRemaining}} Pour lire cet article inscrivez-vous gratuitement ou abonnez-vous Déjà enregistré? Se connecter INSCRIVEZ-VOUS POUR LIRE {{/data.noClicksRemaining}} {{#data.noClicksRemaining}} Vous n'avez plus de clics Souscrire {{/data.noClicksRemaining}} El resultado de las elecciones del domingo en Argentina es sorpresivo, lo que no quiere decir que sea inexplicable. Pero, ciertamente, sorprende por la evidencia de que el ganador, Javier Milei, ha embarcado al país en un proyecto peligroso, cuyas medidas de austeridad, las que ha podido implementar hasta ahora, no son más que un indicador de lo que pretende. Sorprende aún más tras el pésimo resultado de La Libertad Avanza en las elecciones de Buenos Aires hace menos de dos meses. Y también resulta inesperado después de los escándalos en los que se han visto envueltos tanto el propio Milei como su Gobierno en la persona de su hermana. La votación del domingo ha dejado claro que muchos argentinos, si bien no son la mayoría, respaldan o al menos prefieren al presidente ultraderechista. Concurren varios factores, desde la alianza con la Propuesta Republicana del expresidente Mauricio Macri, diluida principalmente en la ultraderecha, hasta el control de la inflación. Esos han sido los méritos de Milei; ciertamente no gran cosa para explicar una victoria que supondrá desbloquear el veto parlamentario a muchas de sus medidas de recortes al sector público, por lo que resulta inevitable poner el foco también en los errores y carencias de la oposición. La participación ha sido la más baja desde el fin de la dictadura, lo cual evidencia, además de la creciente desafección de la ciudadanía hacia sus políticos, que la oposición no ha sido capaz de movilizar al electorado. No ha sido capaz de proponer algo más allá de cerrarle el paso a Milei. Así, difícilmente puede combatir el hartazgo en gran parte de la población provocado por anteriores gobiernos, sin olvidar, justo es reconocerlo, el acoso mediático y judicial al que estos se han visto sometidos. Lamentable sorpresa de la que probablemente ya es consciente la mayor parte de la ciudadanía argentina. De momento, los grandes perdedores son quienes sufrirán las consecuencias de los recortes en pensiones, salud o educación hasta ahora bloqueados. Pero, además, la ayuda financiera del otro vencedor de estas elecciones, Donald Trump, no va a ser precisamente solidaria, y también pasará factura al país.