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Entrevue
Enrique Julián Gómez
Editor web Sphera Sports. Experto del Calcio

«El margen de mejora del Torino de aquí a febrero es muy limitado, su aspecto no cambiará mucho»


El Torino, un equipo grande venido a menos...

Sí. Tras su último pico de éxito a principios de los años noventa, cuando llegó a la final de Copa UEFA y ganó una Coppa Italia, el Torino se ha mantenido a un nivel similar, entre problemas deportivos y económicos, a caballo entre Serie A y Serie B. La pasada temporada dio un salto de calidad gracias a la explosión en ataque de Alessio Cerci y Ciro Immobile. Sin embargo, la venta de ambos este verano ha mermado el potencial del equipo, que vuelve a moverse, como habitualmente en los últimos tiempos, en la zona baja de la tabla.

Un plantel sin grandes jugadores...

La venta de sus dos estrellas este verano ha dejado la plantilla sin ningún nombre sobresaliente. Por historial destacan los delanteros Quagliarella y Amauri, fichados este verano pero ya en la decadencia de sus carreras, o el central Moretti, que jugó hace una década en el Valencia. Quizás lo más destacado este año son los carrileros en la defensa de cinco, en la derecha el brasileño Bruno Peres, muy rápido y profundo, y en la izquierda Matteo Darmian, más equilibrado, que puede jugar en ambas bandas y titular con Italia en el último Mundial.

Su principal carencia, esa falta de gol.

Es el principal problema. En la exitosa última temporada, Cerci e Immobile participaron directamente en la mayor parte de los goles del Torino, bien anotando o asistiendo. Su pérdida es un agujero en el ataque que no se ha podido cubrir en el mercado de verano con Quagliarella, Amauri o Josef Martínez. Además, uno de sus jugadores más creativos en el mediocampo, Omar El Kaddouri, ha bajado notablemente el nivel respecto al año pasado. La falta de mediocampistas creativos les convierte en un equipo pobre en la creación.

¿Defensivamente mejor, no?

En defensa es mucho más sólido. De hecho, pese a estar al borde del descenso, todavía es uno de los equipos menos goleados en Italia. Se aprovechan de la acumulación de jugadores atrás, con los cinco defensas, los expeditivos Glik, Maksimovic y Moretti como centrales, y los centrocampistas muy juntos para disminuir espacios y dificultar las jugadas rivales. Se cierra atrás, presionando poco para salir al contragolpe.

¿Pueden mejorar su nivel de aquí a febrero?

Difícilmente. El margen de mejora de la plantilla es muy limitado, bien por la veteranía de parte de los jugadores, bien por la falta de adaptación de las apuestas realizadas en verano, excepción hecha de Bruno Peres. Salvo llegada de un jugador de calidad contrastada para el mediocampo o el ataque, poco probable, o la mejora de futbolistas como El Kaddouri o Sánchez Miño, el Torino no cambiará mucho su aspecto.