Pasaron los que tenían que pasar

Las cuatro selecciones que era más previsible que se clasificaran lo confirmaron pasando a los cuartos de final, aunque alguna con bastantes más apuros de los esperados que otras. Qatar sigue haciendo rentable su inmensa inversión en este lujoso Mundial, aunque Austria lamentará haber desperdiciado una oportunidad que tuvo al alcance. Lo de Macedonia fue un querer y no poder ante Eslovenia, hasta acabar reconociendo la justicia de la derrota. España debería tentarse la ropa y no echar las campanas al vuelo, porque Túnez fue muy poco rival y no cabe sacar demasiadas conclusiones del partido. Y Brasil se fue con lágrimas en los rostros por la ocasión perdida, que se convertirán en sonrisas en cuanto repasen su trayectoria en este Mundial, en la que ha vuelto a causar muy buena impresión, como ya hizo en 2013.

AUSTRIA-QATAR (27-29). El anfitrión cumplió con el guión logrando una histórica clasificación para cuartos, aunque Austria se lo puso muy complicado apoyada en la gran aportación de sus porteros Bauer y Marinovic (8 paradas cada uno, 36% de acierto en total), y en la eficacia goleadora de Weber (8 de 9), que le valió para llegar con empate a 24 a los últimos cinco minutos.

Pero Valero Rivera movió sus piezas con habilidad, y en los momentos más complicados del final del partido recibió alguna ayuda de la pareja arbitral croata, y Qatar acabó sacando el partido adelante. La primera parte fue de toma y daca, con el montenegrino-qatarí Stojanovic flojo en la portería (3 paradas, 16%), como Capote en ataque, y el otro montenegrino-qatarí Markovic sosteniendo otra vez a su selección (8 goles, 5 antes del descanso). En la reanudación Austria se adelantó (16-14), pero los anfitriones reaccionaron enseguida con un 0-4 que parecía marcar el final de las reservas físicas del lateral zurdo Markovic.

El veterano francés-qatarí Roiné había suplido el bache de Capote con mucha dignidad (5 tantos), hasta que el cubano-qatarí reapareció cogiendo el testigo de Markovic para marcar 5 goles a partir del minuto 48, junto a dos del pivote asturiano-qatarí Borja Vidal. El portero bosnio-qatarí del Barcelona Saric sí blindó la portería (39%), sobre todo desbaratando varios remates a bocajarro del extremo Santos (2 goles de 8 remates, 5 de ellos contraataques fallados).

ESLOVENIA-MACEDONIA (30-28). El partido entre las dos selecciones balcánicas fue igualado, con alternativas durante la primera parte (16-15), pero en la reanudación Eslovenia se puso por delante enseguida y ya no cedió el mando, con Gajic otra vez como máximo goleador (9), secundado por el zurdo Dolenec y Skube (5). Macedonia, con tres jugadores en vena goleadora (los zurdos Lazarov y Georgievski -ambos con 7-, y el pivote Stoilov -5-), intentaban remontar, pero solo conseguían acercarse a un gol en tres ocasiones, chocando con la buena actuación del portero esloveno Skof, nombrado MVP del partido.

CROACIA-BRASIL (26-25). Croacia se libró por los pelos. Visto en perspectiva, Brasil podría convertirse en un rival cualificado en los Juegos Olímpicos de Río 2016, y su trayectoria de aprendizaje desde el Mundial 2013, mostrándose cada vez más competititiva, así lo confirma. Pero es que ayer pudo ganar, lo tuvo en su mano, le faltó algún pequeño detalle... y la portería, que sigue siendo floja. Croacia pareció salir algo apática y Brasil, que siempre juega a tope, se lo hizo pagar caro, con un Silva pletórico (el joven central del Ademar León, que cumple 21 años esta semana, jugaba la pasada temporada en el Barcelona B), para llegar por delante al descanso (13-15). Croacia, que no suele alterarse por eso y acostumbra a gastar las fuerzas justas, regresó con un parcial de 5-0 (18-15) con el que creyó que había encarrilado el partido, pero nada más lejos de la realidad. Brasil achuchaba y volvía a adelantarse (19-20) mientras Duvnjak, Kopljar y Karacic trataban de solucionar el entuerto, y se sucedían los intranquilizadores empates a 20, 21, 22, 23 y 24. Karacic y Duvnjak abrían un hueco de dos goles que parecía definitivo, en un rato de desconcierto brasileño en el que llegaron a perder tres balones, pero a 20 segundos del final Santos hacía el 26-25, y Croacia se afanaba en proteger la última posesión, frente al abatimiento brasileño.

ESPAÑA-TÚNEZ (28-20). No hubo partido. De los principales anotadores tunecinos Sanai no jugó, Bannour marcó un gol de 7, y solo Boughanmi (5) estuvo a la altura, frenada Túnez por la defensa española y el portero Pérez de Vargas (14 paradas, 41% de acierto). El 14-5 en el minuto 22 acababa con la emoción, y el resto fue esperar al pitido final.