La ONU advierte de que el número de refugiados sirios ascenderá a 700.000 a fin de año
El Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR) ha informado de que actualmente hay 294.000 refugiados sirios registrados o a la espera de serlo en los países vecinos de Siria y ha advertido de que se espera que para finales de año la cifra llegue hasta los 700.000.
El Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR) había estimado que el número de refugiados sirios a finales de 2012 sería de unos 185.000, una previsión que ya se había superado en agosto. «La previsión es que lleguen hasta 700.000», ha manifestado en una rueda de prensa en Ginebra el coordinador regional de ACNUR, Panos Moumtzis.
En marzo de 2012, ACNUR había dado un balance de 41.500 refugiados sirios.
«Se está produciendo un importante aumento del flujo, de 100.000 personas en agosto, 60.000 en setiembre y, en estos momentos, de 2.000 a 3.000 personas, cada día o cada noche», que huyen a Jordania, Irak, Líbano y Turquía a causa de los enfrentamientos entre los rebeldes y las fuerzas leales al presidente Bashar al Assad.
«Muchos refugiados llegan solo con lo puesto», ha explicado. «Algunos se han visto desplazados varias veces antes de poder salir de Siria y necesitan ayuda humanitaria desde el primer día», ha advertido. Aparte, ha explicado, entre 5.000 y 6.000 sirios han llegado a zonas del norte de África, sobre todo a Egipto, y otros están huyendo al sur de Europa, en especial a Chipre y Grecia.
El campamento jordano de Zaatri, abierto a finales de julio, alberga en la actualidad a 32.000 refugiados sirios. En este país, casi la mitad se encuentran en apartamentos de alquiler o con familias de acogida, pero los últimos en llegar se han visto obligados a asentarse en campamentos.
En Irak, el campamento de Domiz da acogida a más de 27.000 sirios y en Turquía, cuyo Gobierno ha asumido la plena responsabilidad sobre los campos de refugiados, la gran mayoría de los desplazados –cerca de 88.000– están repartidos en trece campamentos, según ACNUR.
En Líbano, la mayoría de los refugiados viven en apartamentos alquilados o con familias, pero dado el continuo flujo de personas, cada vez hay mayor preocupación sobre las posibilidades de este país para seguir acogiendo a los sirios que huyen del conflicto.
«Jordania, Líbano, Irak y Turquía han dado ejemplo, manteniendo abiertas sus fronteras con Siria», pero «los países vecinos no pueden estar solos, la comunidad internacional debe demostrar su solidaridad», ha emplazado Moumtzis.
230 millones de euros
Con ese objetivo, la ONU y las agencias y organizaciones humanitarias asociadas han reclamado una ayuda extra de 295 millones de dólares (230 millones de euros) que se uniría al anterior llamamiento de 193,2 millones de dólares (150,1 millones de euros) para cubrir las necesidades de los refugiados procedentes de Siria, hasta alcanzar los 487,9 millones de dólares (379,3 millones de euros).
Hasta la fecha, según ACNUR, los donantes han aportado 141,5 millones de dólares (110 millones de euros) al Plan Regional de Respuesta a los Refugiados Sirios, gestionado por diversas agencias de Naciones Unidas y en el que participan 42 ONGs ámbitos nacional e internacional.