Una mirada a la final Manomanista desde la contracancha del Navarra Arena
Rubén Ayarra, preparador y botillero de Joseba Ezkurdia, y José Ángel Balanza «Gorostiza», intendente de Baiko, nos dan algunas claves sobre el partido y sus pupilos.
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«Lo más importante es que es una final que está al 50% y no es una frase hecha. ¿Que puede ganar Laso? Sí. ¿Que puede ganar Ezkurdia? También». Es la primera reacción de José Ángel Balanza, Gorostiza, cuando le preguntamos su pronóstico de cara al domingo, apenas minutos después de haber acompañado a Unai Laso en la elección de material de cara a la final del domingo. El intendente de Baiko y Rubén Ayarra, preparador y botillero de Joseba Ezkurdia nos acercan, desde la contracancha, varias de las claves de un partido que tanta expectación ha creado.
«Mano a mano hay que hacer casi todo bien para ganar y creo que va a ser un partido a tumba abierta, porque son dos pelotaris muy agresivos con mucho poder físico los dos. Joseba quizá tenga un poco más de poder en la volea con la derecha a la hora de defender, pero Unai es muy peligroso, porque enseguida busca acabar el tanto y, cuando tiene pelota a bote, te lleva muy atrás. Creo que va a ser una fina bonita, el que quiera ganar tiene que estar acertado con el saque y luego ser valientes», analiza el palista Rubén Ayarra.
En lo que ambos coinciden es en el gran momento en el que llegan sus pupilos y la confianza que les otorga la forma y el fondo de las victorias de sus pupilos en semifinales. El de Aspe llegó a su primera final manomanista tras vapulear en Eibar a Jaka después de dos semanas sin competir por las renuncias de Altuna III primero y Darío después. «Creo que ha sido el mejor partido de Joseba en el mano mano de todas las ediciones que ha jugado y un poco el partido que le faltaba para tener esa convicción de que puede aspirar a la txapela. Creo que eso también le ha dado mucha confianza porque siempre digo que las semifinales es el partido más difícil para jugar y la verdad que jugó perfecto y salió airoso y eso también a él le tranquiliza de cara a afrontar esta final. Además Eibar es un frontón difícil para él y aquí –en el Navarra Arena– se siente cómodo, le gusta este frontón y llega de hacer un gran partido ante un rival difícil como es Jaka, que siempre te va a enredar en los cuadros de adelante. Sacarlo con esa solvencia le ha dado un plus de confianza a Joseba», analiza Ayarra.
Sacarse la espina
Bastante más tuvo que sufrir Unai Laso para deshacerse del vigente campeón, Jokin Altuna, su verdugo en las dos últimas finales que llegó a adelantarse 17-13 en el Bizkaia. «Altuna le tenía la moral un poco comida en ese sentido. Le dio la vuelta y eso le ha dado un plus, no ya físicamente, porque está hecho un toro, pero sí que psicológicamente ha sido importante esa victoria. No por llegar a la final, sino por ganar a Altuna, que era la piedra de toque que le quedaba. Viendo el partido, pensé que es imposible que se le escape a Altuna, y se le escapó, como ya le sucedió a Laso en su día», analiza Gorostiza.
El de Bizkarreta-Gerendiain ha sido un soplo de aire para Baiko al año de darle la baja y ahora mismo el peso de romper la racha de txapelas de Aspe recae en el joven delantero, algo que no cree que le otorgue una presión extra a su pupilo. «Presión en una final tiene todo el mundo y, el que no la tenga, es inhumano. Presión sí que tiene, pero Unai es un pelotari que la lleva muy bien. Por ejemplo, en la elección de material de semifinales lo vi con cierta tensión y eso me agradó, porque le vi que tenía ganas de ganar y salió bien. Esta vez, quizá lo noté más tranquilo que en la semifinal, porque el trabajo ya estaba hecho y ahora hay que hacerlo el domingo», apunta el riojano.

Ayarra también ve tranquilo a su pelotari, en parte porque Ezkurdia ya ha interiorizado que jugar la final ya es un premio en sí mismo, al que, evidentemente, quiere ponerle la guinda, «pero sabe que ha puesto todo de su parte que no se le puede reprochar nada y que el domingo es un día para ganar pero también para disfrutar».
¿Pero realmente se puede disfrutar en una final? «Si gana seguro, y si no la gana, del proceso de la preparación sí se disfruta y con el tiempo y en perspectiva también. Joseba, sobre todo, ha aprendido a disfrutar del día a día y a tomarse las cosas no solo por el momento instantáneo, sino por todo lo que repercute. Creo que, de cualquier modo, Joseba lo va a disfrutar», apunta el botillero del de Sakana.
El de Arbizu nos contaba entre semana en una entrevista que ha encontrado su sitio, que disfruta entrenando y que por ahí le ha venido ese punto de tranquilidad y confianza que tramite. «La clave es que disfruta de su trabajo y que tenemos un grupo muy conexionado con Carlos –Chocarro– y con Peio –Etxeberria–, en el que nos echamos risas, nos exigimos, nos picamos... Cuando entrenan entre Peio y Joseba siempre se quieren ganar el uno al otro, pero a la vez se lo pasan bien, bromean, son muy amigos. Con Carlos y conmigo hemos hecho muy buena relación y somos una mini-familia y eso le ayuda a disfrutar del día a día».
El domingo a los dos les tocará sufrir, a Rubén Ayarra desde la contracancha y a Gorostiza desde la grada o el pasillo de vestuarios, pero ambos se sienten privilegiados de poder vivir una final así desde dentro.