Osasuna Magna y Oceans Nagoya alcanzan un acuerdo para el traspaso de Fabinho
A falta de tres jornadas para que concluya la competición y con la permanencia garantizada tras la derrota del Betis frente a Valdepeñas, Osasuna Magna ha hecho público el traspaso de Fabinho al Oceans Nagoya, conjunto japonés que entrena Imanol Arregi.
Aunque le restaba una temporada más de contrato, Fabinho no defenderá los colores de Osasuna Magna el próximo curso, ya que el club irurtzundarra ha traspasado al brasileño al Oceans Nagoya, equipo nipón que dirige Imanol Arregi.
Pese a ser una pieza básica en el esquema de Miguel Hernández, el hecho de que no parecía que hubiera intención por parte del jugador de ampliar su compromiso con el conjunto navarro ha impulsado a este último a ejecutar la operación de venta.
De ella no se han trasladado cuantías económicas, si bien en el comunicado emitido por Xota se especifica que el traspaso «supone un beneficio para las tres partes implicadas».
Se da la circunstancia de que Fabinho ya se encuentra en tierras brasileñas y que próximamente se incorporará a su nuevo destino, por lo que no se podrá contar con su concurso en las tres jornadas ligueras que restan, que serán de mero trámite para el bloque irurtzundarra, una vez lograda la salvación matemática tras la derrota del Betis ante Valdepeñas.
El brasileño llegó a la disciplina verde en 2020 y se trata del caso de «un jugador más que viene aquí, va creciendo y busca un proyecto más ambicioso a nivel de clasificación», ha señalado Hernández.
El técnico navarro ha reconocido que se trataba de «un jugador muy valioso para este equipo», pero que de cara a lo que resta de temporada «se da la oportunidad para que otros jugadores den un paso adelante».
«Xota, en el corazón»
El club navarro también ha trasladado a los medios un video de despedida de Fabinho después de cuatro años aquí. «Siempre seré verde y llevaré a Xota en mi corazón», ha afirmado en dicho documento gráfico.
El brasileño, que ha señalado que su hijo es navarro, ha enumerado que aquí «he vivido muchas cosas buenas» y ha recordado un gol con el pecho en Tutera como una de las imágenes «que no olvidaré nunca».
Del mismo modo, ha reconocido que durante este periodo en Osasuna Magna «he crecido como jugador y persona, pues aquí se compite mucho, y he aprendido muchas cosas con Imanol y Miguel».
También se ha referido a la diferente trayectoria del equipo durante estos cuatro cursos. «Pasamos de jugar todos los años la Copa y el playoff a llegar la pandemia y luchar dos temporadas por no descender», ha recordado.
Una montaña rusa que Fabinho la ha vivido de manera «dura, porque los jugadores siempre queremos competir por lo más alto, aunque también me voy muy satisfecho por esta última temporada, que hicimos una primer vuelta muy buena».
En cuanto a su futuro en tierras japones, ha admitido que afronta este nuevo reto con cierto «miedo» por el gran cambio cultural al que deberá aclimatarse, pero que sabrá superar con la ayuda de Imanol, pues el que el técnico navarro se encuentra allí ha resultado «determinante» para hacer las maletas y jugar en el equipo nipón.