Por un convenio propio, los jardineros de Gasteiz suman ya más de dos semanas de huelga

La hierba crece en Gasteiz y no es la primavera. Los trabajadores que se dedican al mantenimiento de los jardines y zonas verdes llevan más de dos semanas en huelga indefinida, desde el 26 de marzo, que ya secunda casi toda la plantilla.

La empresa subcontratada por el Ayuntamiento de Gasteiz para este servicio es Enviser, que ahora pide al Gobierno de Lakua servicios mínimos argumentando que la suciedad y la basura que se acumulan en los jardines pueden causar problemas para la salud. De momento, Lakua no ha respondido a la petición.

Según los datos que facilitó la concejala de Espacio Público y Barrios Beatriz Artolazabal a EH Bildu, de los 80 trabajadores 55 están en huelga, 19 de baja y seis trabajando, pero en la parte administrativa.

Además de un convenio propio diferente al estatal, cuyos salarios «apenas superan» el Sueldo Mínimo Interprofesional, explica un comunicado conjunto de ELA, ESK y LAB, los trabajadores y trabajadoras consideran «necesario negociar nuestras propias condiciones de trabajo». «No nos resignamos a ser meros espectadores de lo que se negocia a cientos de kilómetros de aquí; queremos ser los y las protagonistas», añaden.

Señalamiento al Ayuntamiento

Desde el Consistorio, la concejala Beatriz Artolazabal ha puesto la pelota en el tejado de Enviser asegurando que es un conflicto entre los trabajadores y la empresa y se ha mostrado preocupada porque «los jardines van a estar desmadrados».

Sin embargo, los trabajadores señalan directamente al Gobierno de Maider Etxebarria como «principal responsable» de esta situación. Concretamente, lamentan sus políticas de privatización y subcontratación «para abaratar costes mientras enriquece a manos llenas a empresas pirata que solo buscan el beneficio de unos pocos a costa de la explotación de los y las trabajadoras».

Así, la plantilla se mantiene firme en su intención de continuar con la huelga y advierte de que «si la empresa ni el Ayuntamiento atienden a nuestras demandas, que sean conscientes de que en las siguientes semanas endureceremos la protesta».

Artolazabal denuncia «intimidación»

Por otro lado, Beatriz Artolazabal ha denunciado la colocación por parte de los trabajadores en huelga de pancartas «intimidatorias» en el pueblo donde vive, en Mendibil, del muncipio de Arratzua-Ubarrundia.

En un audio publicado en sus redes sociales con parte de su intervención del miércoles en la Comisión de Espacio Público denuncia las «presiones que se están recibiendo» por parte de los huelguistas.

«Los trabajadores de Enviser vienen a mi pueblo, un pueblito que no llega a 40 vecinos, a poner pancartas en mi casa, de alguna forma intimidándome. A mí no me van a intimidar, pero a mi familia hay cosas que no voy a permitir. Esas rayas no se pueden superar», consideró en ese audio la también teniente de alcaldesa.

Añadía que «esta no es la vía para reclamar mejoras salariales» y que «la huelga es un derecho y la protesta es legítima, pero no se pueden traspasar los límites del respeto».