¿Exceso de salud?

La dietista-nutricionista de 7K pregunta si existe «el exceso de salud», y la respuesta es afirmativa. Como se ha abordado recientemente en distintos artículos, comportamientos adictivos ante prácticas sanas como la actividad física o los alimentos saludables pueden derivar en problemas de salud física y mental.

En una sociedad aparentemente tan preocupada y comprometida con la salud, los que trabajamos en el ámbito clínico, especialmente fuera del enfoque del “salutismo”, sabemos que en no pocas ocasiones hay personas que se pasan de frenada en eso de llevar una vida saludable.

Ya hemos abordado el tema del ejercicio compulsivo como aquella práctica en la que la actividad física pareciera ser un objeto de adicción comportamental y en la que el deporte aparece para regular ciertas emociones, para acabar convirtiéndose en un problema de salud mental muy serio. En este caso, los múltiples beneficios tanto físicos como mentales que proporciona una práctica moderada y regular de actividad física desaparecen por completo.

¿El problema? Que es muy difícil de reconocer por el propio paciente y también de diagnosticar por los profesionales implicados, puesto que está muy normalizado y venerado el hecho de hacer ejercicio y tendemos a creer que, cuanto más de algo bueno, mejor.

Lo mismo ocurre con el consumo de frutas y verduras. Sí, aunque la realidad en este estado es que nos quedamos muy lejos de cumplir con la recomendación de consumir cinco raciones de frutas y verduras como mínimo al día, existe un porcentaje de la población que, no siendo vegetariana, realiza una ingesta muy por encima de esta recomendación.

En este caso también, algo que a todas luces puede parecer beneficioso, en algunas personas puede estar enmascarando un problema importante. Pero, ¿cuándo un consumo de fruta y verdura puede considerarse excesivo y perjudicial? Cuando se consumen no desde el disfrute, sino desde la imposición de ser “saludable”, de tener la alimentación bajo control, de utilizarlo como una malinterpretación de lo que es una dieta adecuada para el mantenimiento del peso corporal o como forma de compensar los malentendidos “excesos” alimentarios. Pero también cuando, además, este consumo extra desplaza la ingesta de otros alimentos igualmente saludables y necesarios para el buen funcionamiento del organismo, como son las legumbres, cereales, proteína de calidad, etc.

Así, con estos dos ejemplos tan básicos, podemos comprobar cómo el exceso de lo saludable puede ser tremendamente perjudicial para nuestra salud física y mental.

Dena bere neurrian

Bizimodu osasuntsu bat izatea gero eta zabalduago dagoen lehentasun bat da gure gizartean. Baina neurri osasungarri horiek muturreraino eramateak arazoak ekar ditzake. 7K-ko nutrizionistaren arabera, dena bere neurrian egin beharra dago. Hau da, ariketa fisiko gehiegi egitea kaltegarria izan daiteke, baita behar baino fruta eta barazki gehiago jatea ere. Oreka mantentzean dago gakoa.