JUL. 12 2015 LIBURUEN TXOKOA Los diarios de Adán y Eva Mark Twain. Ilust: Sara MoranteImpedimenta, 2015, 96 páginas. 17,95 euros MIREN ARTETXE {{^data.noClicksRemaining}} To read this article sign up for free or subscribe Already registered or subscribed? Sign in SIGN UP TO READ {{/data.noClicksRemaining}} {{#data.noClicksRemaining}} You have run out of clicks Subscribe {{/data.noClicksRemaining}} Entre 1904 y 1906 se publicaron en EEUU “Los extractos del diario de Adán” y “El diario de Eva”, dos de los trabajos más personales del autor de obras como “Las aventuras de Tom Sawyer”. Muchos años después de su muerte, ambos relatos aparecieron en un mismo volumen bajo el título “Los diarios de Adán y Eva”. La cuidadísima edición que presenta ahora Impedimenta está ilustrada por Sara Morante, un plus sobresaliente para la lectura de este breve relato, reeditado una y otra vez y convertido en todo un clásico. Con su habitual ingenio y su afinada ironía, Mark Twain nos ofrece su particular visión del primer amor humano, sus primeros pensamientos y las virtudes y desencantos del sexo opuesto. Un texto escrito hace más de cien años, en el que se relatan los avatares y problemas de la vida en pareja y la convivencia, no siempre fácil, aunque sea en el Paraíso. Un filo de luz • Andrea Camilleri • Salamandra, 2015 • 224 páginas. 16 euros • Nueva entrega (la número 20) de la serie sobre Montalbano, el celoso comisario de Vigàta, en Montelusa. Y con él, el subcomisario Domenico Augello, los inspectores Fazio y Gallo, el telefonista Catarella y el agente Galluzzo. En esta ocasión, entra en escena Marian de Rosa, una auténtica femme fatale ante la que Montalbano cae rendido. Y mientras se debate en el torbellino de sus sentimientos (Livia, su novia de siempre, sigue estando ahí), tres casos importantes requieren su atención: por un lado, la jovencísima esposa del dueño de un supermercado es víctima de un atraco; por otro, dos tunecinos que trabajan en una finca agrícola desaparecen en lo que aparenta ser un asunto de tráfico de armas; y por último, una operación delictiva de altos vuelos aterriza en Vigàta. Nadando a casa • Deborah Levy • Siruela, 2015 • 164 páginas. 16 euros • Nada más llegar con su familia a una casa de veraneo en las colinas de Niza, Joe descubre el cuerpo de una chica en la piscina. Pero está viva, sale del agua desnuda con las uñas pintadas de verde y se presenta como botánica. ¿Qué hace ahí? ¿Qué quiere de ellos? Y ¿por qué la esposa de Joe le permite quedarse? La historia se desarrolla a lo largo de una semana en la que un grupo de atractivos e imperfectos turistas en la Riviera son llevados al límite. “Nadando en casa” fue finalista del Man Booker Award en 2012. Alguien • Alice McDermott • Libros del Asteroide, 2015 • 312 páginas. 19,95 euros • La vida, con sus pequeñas alegrías y momentos de felicidad, pero también con sus tristezas y desconcertantes altibajos, es el tema de la última novela de la norteamericana Alice McDermott, ganadora del National Book Award y dos veces finalista del Pulitzer. En ella, los recuerdos aparentemente dispersos y desordenados de la protagonista y narradora, una neoyorquina de origen irlandés, nos envuelven en una telaraña invisible en la que se entretejen la infancia, el despertar sexual, los primeros amores, la maternidad, la formación de una familia y la vejez; en una narración que recorre siete décadas de vida en Brooklyn. Los Pissimboni • Sònia Hernández • Acantilado, 2015 • 128 páginas. 12 euros • «Nadie quería a los Pissimboni. Vivían en una casa cubierta de hiedra en lo alto de una colina, lo suficientemente distanciada de las demás casas como para que todo el mundo considerase que vivían fuera del pueblo. Formaban una familia de muchos hermanos y nadie sabía si el patriarca y su mujer, Ignacio y Martina Pissimboni, todavía estaban vivos. Nunca se les veía en el pueblo, y sus habitantes ya se habían acostumbrado a no pensar en ellos. Nadie les quería ni se preocupaba ya por aquella familia...». Una historia con tintes kafkianos de la catalana Sònia Hernández, que desafía los límites de la ficción.