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FÓRMULA 1

Rosberg anima el Mundial

El alemán logró su tercera victoria de la temporada en Austria y se coloca a diez puntos del líder Hamilton.


Limitada la emoción de cada Gran Premio a saber cuál de los dos Mercedes pisará lo más alto del podio, Nico Rosberg se encargó ayer en Austria de dar algo de vida al Mundial consiguiendo su tercera victoria de la temporada y acercándose a solo diez puntos de Lewis Hamilton, segundo ayer y que sigue al frente de la clasificación.

El alemán tomó el mando de la carrera en la arrancada, protagonizando una salida mucho más rápida que la de su compañero de equipo, al que rebasó en la primera vuelta y luego apenas tuvo que mirar por el retrovisor para guardar distancias sobre su compañero.

Por detrás, la carrera quedó marcada prácticamente de inicio por la espectacular colisión que protagonizaron Kimi Raikkonen y Fernando Alonso. El asturiano había adelantado cinco posiciones en dos curvas, en una salida fulgurante, pero no pudo correr ni diez kilómetros. El finlandés perdió el control de su Ferrari y se llevó por delante al piloto de McLaren-Honda, que volvieron a protagonizar otro fiasco de carrera. El susto por el accidente fue importante y poco después Button tuvo que abandonar por problemas mecánicos, por lo que la esperada evolución del monoplaza de la escudería sigue sin producirse cuando la temporada enfila su ecuador.

Sin muchos sobresaltos

La temprana entrada en pista del safety car estabilizó las posiciones de salida y los dos Mercedes se afianzaron en las dos primeras posiciones, como en el resto de la temporada.

Además de ser las más rápidos, las flechas plateadas están demostrando una gran fiabilidad en carrera y no hay ni rastro de esos problemas mecánicos o de motor que ocasionalmente les daban algún susto el año pasado. Rosberg no mostró ningún tipo de fisuras en su pilotaje y poco a poco fue imprimiendo un ritmo de carrera que su compañero Hamilton no fue capaz de seguir, con lo que perdió contacto con el alemán.

Por si fuera poco, la ansiedad pasó una mala factura. Rosberg había cambiado sus neumáticos una vuelta antes y, cuando el británico pasó por boxes en la 35 para hacer lo propio, pisó la línea blanca al reincorporarse a carrera, una infracción que le supuso cinco segundos de penalización que hicieron aún más líder a Rosberg.

Solo el desgaste de sus neumáticos y de sus frenos puso algo de emoción al tercer triunfo de la temporada de Rosberg que, de todos modos, no tuvo necesidad de echar mano de esos cinco segundos de penalización de Hamilton para ponerle picante a lo que resta de temporada en cuanto al Mundial.

Porque por detrás, ni siquiera la penalización del primer piloto de Mercedes sirvió para que sus perseguidores pudieran poner en peligro otro doblete de la marca de la estrella.

Al menos, la lucha de Massa y Vettel por completar el podio sí resultó emocionante y vibrante. El alemán, más bien su equipo de mecánicos, decantó la balanza a manos del brasileño, cediendo valiosísimos segundos en el pit stop. El tetracampeón se lanzó en persecución de Massa, pero el DRS de su monoplaza no fue suficiente para compensar el potencial del motor del Williams y Massa acompañó a los Mercedes en el tercer escalón del cajón en Spielberg. Bottas fue quinto y Hülkenberg el último que no perdió vuelta.