SEP. 27 2015 BALONMANO División de Honor femenina Lo mejor es pasar página Aiala Zarautz hizo lo que pudo para plantar cara al Rocasa, pero no logró parar el vendaval de las canarias. P. URTAZA AIALA ZARAUTZ 24 ROCASA 44 Ni las zarauztarras ni su entrenador deberían darle demasiadas vueltas a lo sucedido ayer, tan solo para extraer los aspectos positivos, que los hubo. El más importante la respuesta del público que llenaba las gradas de Aritzbatalde, que trató de levantar el ánimo de sus jugadoras en varios momentos, cuando peor lo estaban pasando, y les despidió con una calurosa ovación, lo mismo que al Rocasa, reconociendo deportivamente su apabullante superioridad. Habrá días en que su apoyo será más decisivo, y seguro que estará ahí para empujar a su equipo. Los detalles de pundonor también cuentan para el futuro –la bravura de Kortaberria, incansable en sus intentos de superar la defensa visitante, fue el mejor ejemplo–. Esta vez no bastaron para lograr puntos, pero con esa actitud sacarán adelante más de un partido en casa. No hay que olvidar que en cuatro jornadas ya se han enfrentado a los tres rivales que más goles marcaron en la pasada Liga, y que se caracterizan por castigar implacablemente cada error con acciones de contragolpe. Ayer, en la primera mitad, el Zarautz perdió ocho posesiones –una cifra bastante aceptable–, pero cinco de ellas supusieron la mitad de los goles de contraataque canarios antes del descanso (10), y el despegue definitivo tras unos comienzos en que las zarauztarras aguantaron a duras penas apoyándose en los goles de sus extremos. Los penaltis siguen siendo un problema (ayer fueron 4 de 8) y habrá que pulirlos cara a citas más decisivas, pero la derrota no va más allá. El respeto que inspira Navarro en la portería tuvo su influencia en algunas jugadas, y la impotencia ante el pim pam pum en que se convirtió el partido en algunos momentos no descentró al Zarautz, que trató de seguir haciendo su juego pese al duro marcador.