NOV. 02 2015 BALONMANO División de Honor femenina Zuazo continúa a tres puntos del líder, su próximo rival Las vizcaínas siguen creciendo y acumulan sensaciones cada partido que pasa. P. URTAZA Bera Bera pierde posiciones y Zuazo las gana. Las donostiarras no pudieron sumar en A Sangriña y las de Barakaldo no tuvieron mayores dificultades para traerse los puntos del Carrús. Uno sube y otro baja, aunque el primer balance importante de esta Liga tendrá que esperar hasta el final de la primera vuelta, cuando todos los equipos hayan jugado contra todos y se despeje un poco el panorama. Mientras tanto, el Rocasa se afianza cada vez más en el liderato, tras ganar todos sus puntos, y el At. Guardés da otro paso adelante a la espera de que lleguen sus jugadoras angoleñas. De momento, Zuazo ha llegado en la mejor de las disposiciones posibles a las dos últimas citas antes del parón. El sábado recibirá al Rocasa en Lasesarre con la moral a tope, con algunas jugadoras en un gran momento de forma (sobre todo Nogales y Steinbach, pero también el resto de sus compañeras, que han ido fortaleciendo su confianza conforme sumaban puntos), y la seguridad que da el poder contar con la lateral alemana en sus filas. Y luego viajará a Porriño que, pese a perder en Canarias, sigue enganchado a la cabeza. Bera Bera con problemas de bajas Bera Bera está llegando un poco renqueante al momento más importante de esta primera fase de la temporada, donde se juega una buena parte de la Liga (las dos derrotas consecutivas suponen un serio contratiempo), y también la eliminatoria europea. Con una plantilla un poco corta, y sin poder contar hasta ahora con Mujika, se le han ido acumulando los problemas en las últimas semanas: primero fue un esguince de rodilla de Alicia Fernández, luego el menisco de Ziarsolo –que requerirá una operación–, y el sábado se sumaba Etxeberria, que sintió molestias en el calentamiento, no jugó por precaución, y hoy pasará por el médico para saber el alcance exacto de su dolencia. El próximo sábado recibirá al Porriño, un rival que ha sumado los mismos puntos hasta ahora, 12, y que tratará de buscarle las cosquillas aprovechando que las donostiarras puedan estar algo descolocadas tras los últimos resultados. Lo bueno es que en A Sangriña el equipo se mantuvo competitivo hasta los últimos minutos (22-20 a cinco del final), solo una buena racha de Carrera en la portería impidió que se acercara antes (seis paradas seguidas, con dos penaltis incluídos) y le obligara a un mayor esfuerzo al final. La defensa aguantó más o menos bien, pero el At. Guardés atacó a la zona central una y otra vez con sus cruces y pases a pivote, y fue en el juego ofensivo donde mayores problemas sufrió, aunque el diferente criterio arbitral en la señalización de penaltis en ambas áreas también pudo pesar. Aiala Zarautz necesita centrarse Por abajo la victoria del Málaga en Oviedo le permite salir de la zona de descenso, a donde vuelve Aiala Zarautz. La situación no es demasiado preocupante porque rivales como Elche, Cleba y el propio Málaga siguen a tiro, pero el equipo zarauztarra necesita mentalizarse de que los partidos de casa son su gran baza. Quizá haya que darle una vuelta al siete inicial con que empieza los partidos Martín Larrañaga, aunque solo sea para modificar las posiciones de sus jugadoras. Da la sensación de que con Urtiaga como central al equipo le cuesta arrancar y sus laterales (si no está Zaldua) no tienen recorrido, pero como se vio el sábado, si la capitana se traslada a un lateral podría abrir otras opciones, como la continuidad en las progresiones de jugadoras como Kortaberria, Artola, Ubillos o Granado. En todo caso, cualquier fórmula que sirva para activar al equipo desde el primer segundo estaría bien. El Oviedo, aunque aún no haya logrado ganar, parece que va mostrando las posibilidades de meterle mano a rivales como el Valencia (23-23, que ganó demasiado fácil el sábado), Granollers (26-23 en cancha vallesana, el próximo anfitrión del Zarautz), o el Málaga (26-27, a quien llegó a ganar por cinco en la primera mitad, y próximo visitante en el Aritzbatalde antes del parón).