El misterio de la muerte en una metáfora para el público infantil

E l retraso de cuatro años en su estreno, a pesar de haber sido presentada en 2014 en la Berlinale y en el festival de animación de Annecy, se debe a su complejidad como obra infantil. Para el cine nórdico el abordar metáforas aptas para menores con el fin de acercar el misterio de la muerte a los niños y niñas no supone mayor problema, pero de cara a la distribución internacional ha encontrado dificultades en algún que otro mercado de mentalidad menos abierta y donde la educación se ejerce de modo en exceso paternalista.

Desde los tiempos de “Bambi” (1942), y más tratándose de una producción de Disney, se ha venido hablando del efecto traumático de mostrar la muerte de la madre de una cría de corta edad perteneciente a especies de aspecto vulnerable. Pues bien, el protagonista de “Beyond Beyond” (2014) es un inofensivo y desvalido conejito llamado Johan, el cual pierde a su madre con tan solo tres años. El golpe es tan duro que no acaba de aceptar una tragedia que tampoco llega a comprender, por lo que cree en la posibilidad de viajar al otro lado y traer de vuelta a su progenitora. Como quiera que pertenece a una familia de marineros, se embarca en una aventura guiándose por la señal de auxilio que emite una radio. Un viejo perro llamado Bill le conseguirá el billete para la otra vida.

Ese universo paralelo aparece gobernado por Feather King, un gigantesco pájaro de exótico plumaje. La estética visual de tan oníricos escenarios viene a ser como la versión en 3D de los dibujos de Hayao Miyazaki, con esa mezcla de inocencia y apariciones de pesadilla, en cuanto que la niñez es una mezcla de imprudencias temerarias y miedos insuperables.