JAN. 02 2021 Un libro para recuperar a aquellos presos relegados a ser un número El libro “Entre rejas” es fruto de un ingente trabajo de investigación y documentación de Hedy Herrero, que recoge datos biográficos de 5.917 personas que entre 1934 y 1945 estuvieron encarceladas en el Fuerte de San Cristóbal, en Ezkaba. Bucea en las vidas de aquellos a los que quisieron reducir a simples números en expedientes carcelarios. Ruben PASCUAL IRUÑEA Hedy Herrero (Bonn, Alemania, 1959) comenzó a implicarse en la recuperación de la memoria histórica a raíz de una inquietud personal: reconstruir la historia penitenciaria de su abuelo, Teodoro Hernán Aguado, preso nº 760 del Fuerte de Ezkaba, y de su abuela, Vicenta López Castillar, también represaliada por el franquismo. Tirando de ese hilo, allá por 2008 o 2009, Herrero empezó a indagar para conocer quiénes compartieron penurias junto a su abuelo. Así, ha pasado doce años recopilando y cotejando datos de expedientes penitenciarios, buceando en archivos históricos y recogiendo testimonios de familiares de quienes, muy a su pesar, fueron inquilinos de San Cristóbal. Ese ímprobo trabajo ha adoptado forma de libro que, editado por Pamiela y organizado como si de un diccionario se tratara, recoge un total de 5.917 fichas de personas que pasaron por aquel lugar, muchas de las cuales habían sido encerradas sin juicio previo –en esos casos, lo habitual era que fueran fusiladas a pesar de que en sus expedientes constara que habían quedado en libertad–. De hecho, la autora ha logrado añadir más de un millar de nombres al listado original del libro de registros de presos. Una tarea que no ha estado exenta de obstáculos, como los que se ha encontrado por parte de responsables de la cárcel de Iruñea, y con la que, por supuesto, todavía continúa con el fin de conocer toda la verdad de lo que allí ocurrió. Un eslabón de la cadena Más allá de dar forma al citado libro, la autora ha puesto toda la documentación e información recabada a lo largo de estos años a disposición no solo de los familiares de personas represaliadas que la requieran, sino de instituciones como el Gobierno de Nafarroa o la UPNA y de otros agentes como Aranzadi o la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica. Y es que, para Hedy Herrero, este libro y el conjunto del trabajo que ha venido realizando durante años es un eslabón que forma parte de la gran cadena que es la recuperación de la memoria histórica. Un eslabón, eso sí, con muchísimas horas de trabajo de investigación detrás. Todo suma en este enorme esfuerzo. Incluso las fotografías que jalonan el libro, algunas de las cuales son fotomontajes que superponen imágenes de la época sobre otras que muestran el estado actual de las instalaciones que acogieron la prisión de Ezkaba, una de las tres que había en la ciudad junto a la provincial y la de la Merced. Parte de esas instantáneas fueron expuestas en su día en Iruñea y sirvieron para que algunas personas identificaran a familiares de cuyo paso por San Cristóbal no tenían conocimiento alguno hasta entonces. Como fruto del esfuerzo por poner nombres, apellidos e historias a los números de los expedientes penitenciarios, en el libro figuran perfiles como los de tres familiares del actor Pepe Viyuela, el fotógrafo Andrés Pérez Bálmez, amigo personal del poeta Miguel Hernández y autor de muchos de sus retratos durante la guerra, o el químico falangista catalán José Antonio Serrallach i Juliá, inventor de la mercromina, detenido por intentar matar a Francisco Franco. 5.917 BIZITZAKKalkuluen arabera, Ezkabako Fortetik 6.000 presotik gora igaro ziren. Bere liburuan, Hedy Herrerok horietako 5.917ren datu biografikoak dituzten fitxak jasotzen ditu, eta horietako mila bat ez ziren gatibuen erregistro liburuaren jatorrizko zerrendan ere agertzen.